Cristina G. Moaña

La muerte del presidente de la Asociación de mejilloneros de San Adrián de Cobres (Amesa) de Vilaboa, Paulino García Canda, de 62 años, ha "encendido" todavía más el conflicto que vive el sector mejillonero en Galicia y que ayer se tradujo un día más con la presencia de más de 200 piquetes en el muelle de Domaio para impedir las descargas de mejillón. Los piquetes forman parte de la Plataforma de distribución del mejillón de Galicia (Pladimega) que está realizando este tipo de presión en los muelles para evitar las ventas de mejillón al exterior, principalmente a Italia, a las asociaciones que no están dentro de esta central y venden a otro precio. El presidente de Amesa, uno de los empresarios más fuertes de la zona con 27 bateas, apareció muerto en su casa de un disparo de escopeta y fuentes de la investigación apuntan a que se trató de un suicidio.

Miembros de la cooperativa Amesa, que cuenta con 8 socios y 66 bateas, vinculan la muerte del presidente a la situación que vive el sector: "Era una persona que creó un imperio siempre a base de trabajar, él vendía y el cobraba sin estas presiones".

Vinculada o no, la muerte de este mejillonero va a marcar un antes y un después en el conflicto, como también apuntan fuentes de la cooperativa Virxe do Rosario, contraria de igual manera a Pladimega:_"Se va a organizar una manifestación delante de algún organismo de Pesca para pedir la dimisión de la conselleira Carmen Gallego. Es la responsable de que no se hayan tomado medidas en los muelles para que los mejilloneros podamos vender con libertad". Se da la circunstancia de que Carmen Gallego es vecina de Vilaboa y guarda parentesco con el fallecido.

Las asociaciones contrarias a Pladimega son Virxe do Rosario con 94 bateas en Arousa; Ríanosa en Moaña con 55 y Amesa, con 66; además de Cons de Udra, en Bueu, y Moaña, que todavía no han formalizado su entrada definitiva. Fuentes consultadas aseguran que Ría de Vigo, de Moaña, con 50 bateas, quiere salirse de la Plataforma pero debe resolver antes una deuda. Estos colectivos reclaman que se acaben las coacciones contra los que no quieren entrar en el sistema de precio único.

Más de 200 personas impidieron descargar en este muelle

El muelle de Domaio, en Moaña, volvió ayer a llenarse con un piquete de más de 200 personas, procedentes de Vilaxoán, que estuvieron de forma pacífica controlando que no se realizaran descargas de mejillón. Ningún bateeiro contrario a Pladimega acudió a descargar por temor a incidentes. Uno de los integrantes del piquete asegura que el motivo de estar en el muelle es porque "no está dentro del control y se está vendiendo a bajo precio, entre 0,40 y 0,45 centímos el mejillón de exportación". Añade que con estos precios más bajos "nuestras ventas cayeron una barbaridad". El precio que se quiere establecer es de 0,62 céntimos a partir de bolsas de 32 a 45 piezas. "El problema es que a algunos no les gusta estar controlados. El 80% del sector está en situación crítica por culpa de este 20%. Si venden a ese precio es porque quieren sacar el producto en dos días". Los contrarios acusan a Pladimega de incumplir ellos mismos los precios y descargar sin control.