La Gerencia de Gestión Integrada de Santiago inauguró ayer el nuevo Hospital de Día de Hematología, con capacidad para dar asistencia a unos 120 pacientes, que es la media de usuarios que acuden diariamente a consultas y de los que unos 40 suelen recibir tratamiento. Las atenciones más habituales son a pacientes con linfomas, leucemia aguda o crónica y con mielomas múltiples, tal como explicaron ayer Eloína Núñez, gerente del área sanitaria compostelana, y José Luís Bello, jefe del servicio de Hematología, durante la visita inaugural de las nuevas instalaciones.

La gerencia sanitaria explica que dispondrán desde ahora de unas dependencias que cuentan con diez puestos y tres camas para recibir tratamientos, cinco consultas, una sala de biopsias, una consulta de enfermería y otra médica para atender pacientes trasplantados, cuatro baños, tres office y un control de entrada. El hospital de día comenzó a funcionar ayer, aunque empezará a recibir pacientes el lunes. Por el momento, se trabaja en la definición y adecuación de circuitos y en la formación de personal de nueva incorporación.

Se trata de un amplio espacio que permite a los pacientes hematológicos contar con un hospital diurno independiente, lo que repercutirá "en la agilización de sus tratamientos, en una atención más personalizada y en la mejora del confort", explican desde la gerencia. De este modo, el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) "garantiza la máxima calidad en la atención sanitaria que brinda a todos los usuarios, con especial excelencia a los pacientes de patología oncohematológica". Tras un largo y complejo proceso de reorganización de espacios, que conllevó liberar sucesivamente diferentes instalaciones ocupadas por otros servicios, desde ayer los pacientes del área sanitaria compostelana -que incluye Deza y A Estrada- cuentan con dos hospitales de día diferenciados.

La asistencia a pacientes con tumores sólidos y oncohematológicos está organizada según un modelo que trata de conseguir que reciban la atención lo más cerca de su lugar de residencia y permanezcan en su domicilio todo el tiempo posible. Para ello, es necesario facilitar la coordinación entre niveles asistenciales y de la atención intrahospitalaria a fin de ofrecer un servicio integral y personalizado, consensuar la actuación oncológica y favorecer la continuidad de cuidados en los distintos momentos evolutivos de la enfermedad.

El hospital diurno fue concebido para ofrecer asistencia integral a los pacientes, de modo que cada vez que acuden a recibir tratamiento se aprovecha para realizar todas las actuaciones, como extracción de sangre, consulta, prescripción, preparación de la medicación y administración del tratamiento.