La fuente del parque de Silleda, inaugurada hace un par de semanas, no deja a nadie indiferente. A unos les encanta la uniformidad pétrea con el resto del enlosado y el homenaje a las parroquias y otros hubiesen preferido una solución más tradicional o incluso recuperar la antigua fuente. Pero en lo que casi todos coinciden es en su peligrosidad, sobre todo para los niños. Por eso, desde el Concello advierten de que la fuente es "ornamental" y no un espacio de juego.
Las quejas de madres y padres, transmitidas también a esta Redacción, han llegado al consistorio de forma presencial y través de llamadas telefónicas. Las cuestiones que más preocupan tienen que ver con la potabilidad del agua y con el peligro que suponen las propias piedras y, sobre todo, los pitorros por los que salen los chorros de agua.
El Concello colocará un cartel con la advertencia de que es una fuente "ornamental" y, como tal, "no se puede subir encima de ella". Respecto al agua, hasta ahora funciona con la de la traída, por lo que puede beberse, pero, cuando esté terminada la obra, será un circuito cerrado, como el de cualquier fuente ornamental, y no será apta para el consumo humano. En cualquier caso, la fuente ya ha recuperado su surtidor de agua potable, mediante un grifo instalado ayer por Espina y Delfín, sobre el que se colocará un cartel informativo.
