Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Guillermo Aymerich Goyanes: "No hay mucha gente en Lalín que haya visto cómo se desenvuelve un pintor"

"Si llueve, realizaremos la pintura en el Kilómetro 0 con vino, leche y lluvia"

Aymerich estará mañana en la víspera de la Feira do Cocido. // Lin Mei

El centro neurálgico de Lalín será escenario mañana de la intervención artística de Guillermo Aymerich en vísperas del día grande de la Feira do Cocido. El evento, que lleva por título Leite, viño e reivindicación no Km 0, consiste en una pintura efímera que reproducirá la Fraga de Catasós. Aymerich tiene previsto llegar hoy a Galicia. Ayer atendía a la llamada de FARO DE VIGO desde Valencia.

-¿Cómo se prepara para realizar una intervención como la de Lalín?

-Es pintura, nada más. No hay nada ajeno al mero hecho y proceso de pintar. Cuando estás en el estudio te lo planteas de forma más reposada. En este caso, tampoco me voy a poner a pintar cinco horas, ni nada parecido. Lo que hay que hacer en Lalín es una cosa adrede, in situ, con un tema relacionado con el pueblo. Básicamente, lo que haré será un boceto a tamaño grande, pero con características ágiles porque se trata de algo caduco y momentáneo.

-¿Espera sorprender a los que se acerquen a contemplarlo?

-No creo que haya mucha gente en Lalín que haya visto cómo se desenvuelve un pintor. Se trata de hacer visible ritual del pintor en relación con su soporte, que en este caso será un cruce de carretera. Yo diría es casi didáctico todo.

-¿Cuánto tiempo tiene previsto invertir en la intervención? ¿Trastocará sus planes la posibilidad de que pueda llover el sábado?

-Está previsto que empecemos a eso de la una de la tarde, y supongo que cuando nos entre el hambre iremos a comer. Todo dependerá de la gente que acuda a la cita. En cuanto a lo de la lluvia, estuve viendo la predicción y parece que se va a aguantar y como mucho estará nublado. De todas formas, si llueve pintaremos con vino, leche y lluvia en el Kilómetro 0.

-¿Cuánto tiene de oriental el trabajo que tiene pensado llevar a cabo en el centro de Lalín?

-Como dije en su momento, la idea mezcla los mecanismos chinos que recuerdan la escena habitual de los parques y los ciudadanos de cierta edad caligrafiando el suelo, como pasa en muchas partes de China, con significados típicos de Deza. Quiero dar visibilidad, también, al problema ecológico, cultural y social actual que estamos viviendo. Como adelanté, las maniobras pictóricas que se lleven a cabo en el centro de Lalín se registrarán de modo fotográfico y, también, con la edición de un vídeo.

-A propósito de Asia, ¿sigue realizando proyectos por allí?

-Me voy el lunes a Pekín, y de allí volaré al día siguiente a Tokio. Estoy desde hace años con una serie de cuadros sonoros, de los que se pueden afinar y tocar. Empecé yo solo por allí, y ahora somos unos 16 artistas, entre los que se encuentran el músico lalinense Xocas Meijide y el compositor Nani García. Yo soy el encargado de realizar los cuadros y para la parte musical echo mano de gente de esa categoría porque son los que saben de música más que yo.

-¿Y su vertiente literaria?

-De forma paralela, sigo haciendo escritos y dando conferencias internacionales en varias partes del mundo desde hace algún tiempo. Es algo que hice en Islandia, en el mismo Tokio e incluso en Valencia, recientemente. También me gusta teorizar en círculos internacionales y procuro hacerlo a menudo.

Compartir el artículo

stats