El Lagar de Ribela abrió ayer sus puertas para acoger la tercera edición de las Jornadas Turismo y Sidra, un seminario impulsado por la Universidad de Vigo en el marco del Master en Dirección y Planificación del Turismo de Interior y de Salud. En este contexto el sector sidrero de A Estrada se perfiló como un importante motor de dinamización turística, dibujándose la meta de crear una ruta de la sidra en el municipio, aprovechando el florecer de lagares que retoman o inician su actividad y de grandes plantaciones de manzano para la producción de sidra.

Estas jornadas comenzaron a primera hora de la mañana en una plantación de manzana autóctona ecológica. Los participantes en este seminario recorrieron una finca de Olives para conocer de primera mano una explotación de estas características. Seguidamente, los participantes visitaron las instalaciones del Lagar de Ribela, pionero en la comunidad en la elaboración de sidra ecológica de forma artesanal y utilizando manzanas autóctonas.

Tras conocer, de la mano del propietario de este lagar estradense, Jesús Armenteros, cómo es el proceso de elaboración de sidra, los asistentes a estas jornadas participaron en una mesa redonda en la que se analizó el potencial turístico de A Estrada como municipio de interior y su vinculación a la cultura sidrera

Esta mesa redonda se diseñó con voces de distintos agentes de este tejido productivo y turístico, caso de la amplia red de turismo rural de A Estrada, la actividad que proponen entes asociativos para que los visitantes descubran el municipio o los propios lagareros. Así, contó con la participación del propietario de Casa da Pastora (Tabeirós), Fernando López Luis, el integrante de la asociación Codeseda Viva Carlos da Barreira, el propio Jesús Armenteros y el director de este master en Turismo, José A. Fraiz.

El propietario de Lagar de Ribela, también presidente de la asociación Maceira e Sidra, hizo hincapié en el potencial turístico de este sector. Consideró que esta capacidad puede vincularse a la realización de rutas de senderismo por la zona o ser un importante atractivo para los clientes que eligen un establecimiento de turismo rural en el municipio, poseyendo asimismo gran importancia gastronómica. En todo caso, a través de esta mesa redonda se asume que el sector se enfrenta todavía a limitaciones, caso de las carencias en materia de infraestructuras o de mala señalización, por ejemplo.

Armenteros destacó que apuestas como las rutas sidreras ya existen en Asturias y que, con el tiempo, esta sería una aspiración para el municipio estradense, aunando la experiencia de los lagares que continúen surgiendo y las plantaciones de manzanos.

La cultura sidrera experimentó en los últimos años un importante resurgir en A Estrada, con una arraigada tradición en lo que elaboración de sidra se refiere, aunque esta producción cayó durante años en el olvido desbancada por la elaboración del vino En estos momentos el municipio camina hacia su tercer registro para la comercialización de sidra ecológica.

Uno de los escaparates para este sector local está siendo en los últimos años la Feira da Sidra, en la que también se dan cita lagares llegados de distintos puntos del país. Para este evento ya se está buscando el reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Gallego.

Lagar de Ribela planea embotellar entre marzo y abril su cuarta cosecha. Programa entre 20.000 y 30.000 botellas. Esta sidra ha elevado sensiblemente su exportación, contando con una distribución muy potente en Estados Unidos y estando presente en Alemania, Francia o los países nórdicos. En el otro lagar con registro, en Agar, la previsión es comercializar 3.000 litros de Sidra Peroja, elaborada siguiendo los cánones tradicionales y artesanos.