El apagón de la señal de televisión analógica provocó ayer en la comarca más de una sorpresa, puesto que buena parte de sus vecinos comprobó que mantenía el servicio primitivo pese a que Deza era una de las zonas en las que se suspendieron las emisiones poco después del mediodía. La proximidad con Santiago de Compostela y el hecho de que muchos usuarios tengan su antena orientada hacia el monte Pedroso ocasionó que numerosos televisores mantuviesen la sintonización de los canales mediante el sistema analógico; algo que conservarán hasta el próximo día 1 de febrero, según fuentes oficiales.
Jesús Sandá, director de TDT (Televisión Digital Terrestre) de la empresa pública Retegal confirmó esta posibilidad pese a que se realizó la suspensión del servicio en las antenas de la comarca, instaladas en el monte O Carrio (Lalín) y en Siador (Silleda). “Además de que haya antenas orientadas a Pedroso, en esta comarca también se desplegó una red de micro reemisores, que a su vez están dirigidos al mismo punto, por lo que es probable que hasta febrero mantengan la señal analógica”, afirmó. Además, destacó que estas antenas sirven, no solamente la señal de la televisión autonómica, sino que desde hace tiempo también ofrecen la de las privadas. No obstante, Sandá no descarta que en próximos días pueda haber problemas para sintonizar la televisión, si no se dispone de un decodificador de TDT.
Los dezanos se despertaron con la incógnita de conocer en qué momento se suspendería el servicio analógico, sobre todo para los vecinos que no habían adquirido un receptor digital o, en el caso de los que sí lo habían hecho, para corroborar las zonas sin cobertura de la nueva tecnología. El territorio sin este nuevo servicio apenas representa, según Retegal, un 15% en la comarca, con excepción de Dozón. Este municipio está integrado dentro del área técnica de Ourense (Meda) y el apagón se retrasará hasta finales de mes.
Sandá explicó que la comarca cuenta con unos índices de cobertura muy elevados, aunque admite que en algunas zonas de sombra pueda haber problemas con la TDT. De hecho, así ocurre en lugares de los municipios de Lalín o Silleda, precisamente los que están próximos a los repetidores del monte O Carrio o Siador. “Llegar al ciento por ciento es muy complicado”, declara.
Otra particularidad se da en el municipio de Vila de Cruces, donde la mayor parte de sus residentes consiguen la señal desde O Carrio o mediante el poste que la firma Abertis instaló en la zona de O Camballón. Algunos residentes volvieron a denunciar que una deficiente señal de Retegal provoca que tengan problemas para sintonizar el paquete de canales de TVE. El técnico de la empresa pública admite que la cercanía de las dos antenas puede ocasionar interferencias, que con el nuevo modelo deberían quedar subsanadas. En puntos de la parroquia de Toiriz, los vecinos tuvieron problemas para sintonizar la televisión digital.
En Lalín y Silleda se registraron menos dificultades, debido a que la cobertura en ambos municipios oscila entre el 97 y el 98% de su territorio. En todo caso, Sandá sostiene que en los próximos días podrán evaluarse con exactitud las zonas de sombra, ya que los vecinos solamente podrán ver la televisión con el nuevo modelo.
Certificado
En estos casos, recomienda a los usuarios que se pongan en contacto con la Xunta en el teléfono 012 para garantizar un servicio en el conjunto de la comunidad autónoma. Sandás aclara que el gobierno gallego pondrá en marcha en los próximos días un operativo de atención ciudadana, pero aconseja a los vecinos que sigan el modelo establecido para estos casos. Consiste en que un instalador autorizado de TDT vía satélite (hay dos en la comarca) certifique que su lugar se encuentra dentro de una zona de sombra. Ese expediente se remite luego a la Xunta, quien determinará “las vías necesarias para garantizar este servicio”. En todo caso, los particulares deberán asumir el gasto de entre 200 y 300 euros que cuestan el decodificador y la antena parabólica para disponer del nuevo modelo en sus televisores.
Entre las incidencias registradas en el día de ayer destacan algunas ya advertidas por instaladores o vendedores de descodificadores la semana pasada. Numerosos residentes no pudieron recibir correctamente el servicio de TDT por tener mal orientadas las antenas o estar deterioradas. En este caso, deben solicitar la ayuda de un técnico para que revise su situación. “Pensamos que non había sinal, pero é que tiñamos mal orientada a antena”, comentaba un lalinense. Las empresas de electrodomésticos y técnicos de televisión se ven desbordadas estos días por la demanda de revisión de los sistemas, a pesar de que era algo que ya había sido advertido incluso años antes del apagón analógico.
También existen afectados que durante el día comprobaron una sintonización distinta de las cadenas, sobre todo cuando se produjo el cese de las emisiones, aunque la mayor parte de la comarca ya estaba preparada para este cambio, con millares de decodificadores vendidos en los últimos días.
