El Concello de Lalín está trabajando intensamente en el proyecto de presupuestos municipales para 2009 y, como dijo el alcalde, Xosé Crespo, a comienzos de septiembre, pretende que sea continuista y similar al del año en curso. Por ello, desde el gobierno local se está trabajando en la búsqueda de ingresos atípicos y en la aplicación de políticas de ahorro para conseguir mantener las cuentas en torno a los 17 millones de euros.

En principio, las principales partidas no experimentarán variaciones importantes, ya que los fondos del Estado se incrementarán ligeramente al incluir unas cantidades adeudadas de años anteriores y el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el de mayor recaudación, seguirá repercutiendo entre 2,5 y 3 millones de euros. En principio, los ingresos del Catastro se mantendrán iguales, según explicó en el pasado pleno el edil de Facenda, Manolo Gómez. Así, pese a que el BNG denunció una subida media del 8,5%, el padrón del IBI se mantendrá inalterable, según Gómez.

En cuanto a otros tributos de gran recaudación, el de la basura se moverá en términos similares a los del presente 2008, pero el principal problema se detecta en el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO), que está sufriendo una caída importante en el concello lalinense ya en este mismo año y que se prevé que continúe en el próximo. Cabe señalar que en 2006 las arcas municipales ingresaron más de un millón de euros por este concepto y que en 2007 la cifra se disparó por encima de los 1,4 millones. De este modo, el concello estaba acostumbrado a contar con una "bolsa" de al menos un millón por este tributo, pero la crisis de la construcción va a romper esta racha. En principio, el ejecutivo había previsto unos ingresos de un millón por el ICIO para 2008, pero la realidad es que en los nueve primeros meses del año la recaudación se ha quedado en apenas 266.000 euros. Así, aunque falta por contabilizar el último trimestre, la cifra final supondrá una caída de 700.000 euros respecto al presupuesto.

Para las cuentas de 2009, las previsiones municipales serán más realistas, ya que la crisis no será sobrevenida, pero aún así se necesitará buscar unos 700.000 euros de ingresos atípicos para compensar la regresión del ICIO y poder mantenerse en torno a los 17 millones.

Así, la política de ajuste del gobierno local ya tiene marcadas algunas líneas, tanto en la generación de nuevos ingresos como en las actuaciones de ahorro En la primera modalidad, se espera que el parque eólico singular de Lebozán, una iniciativa de promoción municipal, reporte entre 180.000 y 240.000 euros anuales desde su puesta en funcionamiento, que está programada para el 1 de enero. En esta materia, cabe señalar que el IBI de estos complejos energéticos como bienes especiales ingresará 17.000 euros en las arcas municipales en 2009, una cifra que el concello considera irrisoria y que Crespo está dispuesta a recurrir en los tribunales si no fructifican sus negociaciones en Catastro Como nuevos ingresos también se contemplan los de la nueva tasa que gravará a las compañías de teléfonos móviles por el uso del espacio público en la capital dezana. En principio, y aunque existen dudas sobre el cobro, se esperan recibir 86.000 euros más.

En el apartado del ahorro, el concello aspira a reducir en unos 120.000 euros al año la factura de casi 600.000 que abona a Unión Fenosa por la electricidad del alumbrado y de los edificios públicos gracias a un plan de eficiencia. También tiene garantizada una reserva de 50.000 euros por el recorte que se impuso en los bonos del transporte para estudiantes universitarios.

Así, con estas cinco iniciativas, las arcas municipales dispondrán de 473.000 euros más y se acercan a los 700.000 precisos ante el derrumbe del ICIO.