Silvia Pampín / A ESTRADA

La Federación Gallega de Mueblistas solicitará en los próximos días una entrevista con el conselleiro de Innovacióny con la directora xeral de Comercio, Fernando Blanco y Ana Rúa, a fin de pedirle la adopción de medidas que impidan la "competencia desleal" que, a su juicio, supone que comerciantes de muebles lusos de Paços da Ferreira financiados por instituciones portuguesas acudan a vender mobiliario directamente al público en recintos feriales públicos de Galicia, como ocurrió el pasado año en Vilagarcía y hace unas semanas en A Coruña.

En una reunión que tuvo lugar el viernes en la sede de la Federación Gallega de Mueblistas que preside Miguel Agromayor, unos 150 representantes de las principales asociaciones de fabricantes y comerciantes de muebles de Galicia -entre ellos el presidente de la Asociación Comarcal de Empresarios y vicepresidente de la Cámara de Comercio de Vilagarcía, el estradense Gonzalo Figueiras, pero también representantes de mueblistas y agentes comerciales de A Coruña, Lugo, Ourense y Pontevedra- conocieron que se ha podido constatar la comisión de "irregularidades" en el certamen de A Coruña. En concreto, según Agromayor, la Federación Gallega de Mueblistas dispone de una factura que acredita que en esa feria se produjo al menos una venta realizada directamente al público y se retiró el producto del certamen con un IVA superior al español (un 21% del importe de la venta frente al 16% estatal) en tanto que la legislación vigente explicita que los recintos feriales son eminentemente profesionales y, por ello, la federación entiende que las ventas que se produzcan en estos recintos -construidos con dinero público gallego- deberían limitarse a transacciones entre fabricantes y comerciantes.

El presidente de los mueblistas de Galicia subrayó que precisamente por ello como comerciante hace una década se pronunció en contra de la Feira do Moble da Estrada por realizar ventas directas al público pero, acto seguido, subrayó que la diferencia entre la feria de A Estrada y la de los mueblistas lusos estriba en que los primeros tributan en España, estando dados de alta en Hacienda y en sus ayuntamientos respectivos, en tanto que los mueblistas portugueses venden directamente al público gallego sin pagar a Hacienda ni estar dados de alta en ningún ayuntamiento gallego.

En su opinión, certámenes como los que tuvieron lugar en A Coruña o en Vilagarcía se producen debido a que Galicia dispone de un excesivo número de recintos feriales por "localismo de los políticos". Cree que sus respectivos gerentes tratan de atraer nuevas ferias para que sean rentables. Lo que ocurre es que, en el caso de los mueblistas lusos que venden directamente a un público gallego, quienes se ven perjudicados son los mueblistas gallegos, tanto los fabricantes -que afrontan el pago de salarios y seguros muy superiores a los del país vecino- como los comerciantes. Los mueblistas gallegos defienden la "libre competencia" pero "en igualdad de condiciones". Asimismo, también se consideran perjudicados por la realización de las ferias de comerciantes lusos en Vilagarcía y en A Coruña fabricantes portugueses proveedores de los comerciantes gallegos. De hecho, en la reunión del viernes participaron varios de ellos, que suelen acudir a Exponor.

Agromayor confía en la ecuanimidad del conselleiro de Industria y en el buen hacer de la directora xeral de Comercio para evitar que certámenes lusos como los que ya tuvieron lugar en Vilagarcía o A Coruña se vuelvan a producir. Cuando suenan rumores de un nuevo certamen en Vilagarcía este otoño, espera que la administración autonómica logre impedir su celebración. Para ello, los mueblistas también proyectan pedir el apoyo de los principales grupos políticos con representantación en el Parlamento de Galicia (PP, PSOE y BNG). Continuarán así las movilizaciones emprendidas en enero por los mueblistas del área de la Cámara de Comercio de Vilagarcía -A Estrada, Caldas, O Grove, Sanxenxo y Rianxo, entre otras localidades- y en los últimos meses por los de la provincia de A Coruña.

El presidente de los muebleros gallegos estima que si es preciso suprimir recintos feriales habrá que hacerlo y dedicar los sobrantes a otras cuestiones. Los que haya tienen que tener unas instalaciones dignas y, en este sentido, apunta que los pabellones de A Estrada deberían mejorarse. Aboga por que la Xunta impulse decididamente las ferias profesionales para que se eleve el nivel de diseño hasta cotas como las que ya lograron firmas de A Estrada que nada tienen que envidiar a las de otras zonas de España.