En torno a un millón de euros. Es el dinero en efectivo que Policía Nacional y Guardia Civil calculan que la presunta banda de butroneros albanokosovares desmantelada en Vilagarcía habría sustraído a distintas empresas gallegas mediante la comisión de 51 robos con fuerza en naves industriales durante el último año.

La investigación de esta "peligrosa" y "especializada" organización criminal -así la definen las fuerzas del orden- arrancó en marzo de 2017 a raíz de una denuncia por un robo en A Coruña perpetrado mediante el procedimiento del butrón. Los ladrones habían accedido a una nave del polígono industrial de A Grela a través del tejado.

Durante la investigación los agentes tuvieron conocimiento de la comisión de hechos similares en parques empresariales de Ribeira, Santiago y Marín, por lo que al constatar que los golpes se estaban produciendo en toda Galicia se puso en marcha un operativo conjunto de Policía Nacional y Guardia Civil que ha permitido desarticular este presunto "grupo criminal" mediante la detención de cuatro ciudadanos albanokosovares el pasado lunes en Vilagarcía, en el barrio de As Bocas, donde se encontraba la base de operaciones de esta red internacional de presuntos butroneros.

En los dos registros llevados a cabo en esta zona de Vilagarcía, concretamente en un domicilio de la calle Nogueira y otro de la calle Figueira, como ya publicó FARO, los agentes se incautaron de numeroso material que los supuestos delincuentes utilizaban para sus fechorías, como mazas, taladros, radiales, palanquetas, cizallas, hachas, linternas, inhibidores de frecuencia, intercomunicadores para hablar entre ellos durante los robos, escaleras, cuerdas, pasamontañas, mascarillas, mochilas, guantes y numerosos teléfonos móviles. Los policías también decomisaron 3.000 euros en efectivo y dos vehículos, además de recuperar "numerosos efectos sustraídos".

Sendos cuerpos de seguridad mostraron ayer en A Coruña todo el material intervenido en esta operación desarrollada por especialistas en delincuencia organizada de Policía Nacional y Guardia Civil, además de contar con la colaboración del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) de la Jefatura Superior de Policía de Galicia.

Según recoge Europa Press, el portavoz de la Policía Nacional, José Vila, señaló que el modus operandi de esta presunta organización criminal era siempre el mismo. "Uno de ellos entraba en el polígono industrial un rato antes y hacía una primera tentativa para ver si saltaba la alarma. Tomaban medidas de seguridad para poder actuar con más calma", explica. Además, destacó la "alta especialización" en cometer robos con fuerza, coordinados y con un reparto de papeles en la ejecución del delito.

Por su parte, la portavoz de la Guardia Civil, Yaiza Hidalgo, indicó que "se sigue investigando el caso y no se descarta que pueda haber más robos que les implique directamente", además de los 51 que los investigadores ya han esclarecido. A los cuatro albanokosovares detenidos se les imputa policialmente los delitos de robo con fuerza y pertenencia a grupo criminal.

Cámaras en Cambados

Los últimos golpes de esta supuesta red de butroneros procedentes de países del Este se habrían desarrollado en Arousa, concretamente en Cambados y Vilagarcía. En la villa del Albariño habrían actuado hace un par de semanas en el polígono de Sete Pías, donde las imágenes captadas por unas cámaras del Concello fueron aportadas a la investigación, ayudando así a clarificar los hechos.

En Vilagarcía, los cacos actuaron en una conservera de O Pousadoiro la madrugada del 1 de mayo, día festivo.