El Colectivo Ecoloxista do Salnés (CES) celebró ayer una asamblea en la que puso sobre la mesa sus proyectos de futuro. Entre ellos está el desarrollo de un expediente para conseguir proteger árboles singulares en la comarca, entre ellos un grupo de alcornoques localizados en el Concello de Meis y un espino de gran porte existente en la isla de Cortegada.
Se trata de seguir los pasos para que, como sucede con plantas ya incluidas, tales como la "Figueira do Meco", en O Grove, el "Catálogo de Árbores Senlleiras de Galicia" pueda dar entrada a otras existentes en la comarca también merecedoras de tal reconocimiento.
Marta Lois que sigue como presidenta de una junta directiva que no sufrió cambios en esta asamblea, explica que "hay especies muy interesantes en la comarca", entre ellas el citado alcornocal de Meis, con una peculiar y llamativa formación.
Pero también destaca ese espino de la isla vilagarciana de Cortegada; una planta que en Galicia se conoce como "estripeiro", "espiñeiro" o "pereira brava", dependiendo de la zona. Es una especie muy utilizada en la huerta, cuando aún es un árbol joven, para injertar diversos tipos de frutales.
En la asamblea, donde se dio cuenta de que el CES tiene 151 socios, también se abordaron otros planes de ejecución a lo largo del presente ejercicio, tales como la protección del cordón dunar existente en la playa de Montalvo (Sanxenxo).
"Trataremos de conseguir que se introduzcan medidas de protección en la zona y sea vallada para acabar con las agresiones se sufre constantemente, tanto a causa de las hogueras que se realizan en San Juan como debido a los desbroces y al paso o estacionamiento de vehículos", detalla la presidenta de los ecologistas.
Otra de las acciones a desplegar guarda relación con la tenencia y educación de las mascotas. El objetivo de la entidad es organizar actividades de divulgación y concienciación para evitar que los perros causen daños en el medio natural, especialmente cuando pasean junto a sus dueños por playas, dunas o senderos fluviales.
Lo que pretende el CES es inculcar a los propietarios de los canes hábitos de comportamiento que impidan agresiones sobre la flora y la fauna, como las que pueden cometer los animales al perseguir a determinadas aves o invadir las zonas de cría de especies como el chorlitejo patinegro, por citar un par de ejemplos.
La asamblea del CES celebrada en Cambados sirvió, igualmente, para anunciar que el día 27 se realizará la ya habitual inspección del río Umia.
