La demanda de ayuda a las ONGs por parte de familias sin recursos económicos no cesa. Así lo constata la Fundación Amigos de Galicia, que cada vez atiende a más vecinos en riesgo de exclusión de más de un centenar de municipios gallegos, entre ellos los de Vilagarcía, Cambados, Ribadumia, O Grove, Meis, Meaño y Pontecesures.

Además del paquete de alimentos mensual que la entidad envía a los domicilios a lo largo de todo el año, en el reparto de diciembre todos los hogares con menores -114 en la capital arousana y más de 500 en la comarca- recibirán juguetes nuevos para que ningún niño se quede sin regalo de Navidad.

Para poder llegar a todas las casas, Papá Noel y los Reyes Magos cuentan con la desinteresada colaboración de voluntarios como Mercedes Pardo, una jubilada de Cambados que se enteró por la prensa de que la Fundación necesitaba personas para empaquetar juguetes. Y no se lo pensó. "Ayudo a los demás y al mismo tiempo me entretengo. Vengo tres veces a la semana por las mañanas", confiesa la cambadesa, que ayer estuvo acompañada por Begoña Martínez, una trabajadora de Amigos de Galicia que, aunque habitualmente se encarga de la lavandería, en estos momentos está volcada en la campaña de juguetes.

Ambas coinciden en la necesidad de conseguir más juguetes para niños de entre 6 y 8 años, por lo que cualquier persona puede acercarse a la nave de Amigos de Galicia (junto a la estación de autobuses de Vilagarcía) y realizar una donación. El único requisito que se exige es que debe ser un artículo nuevo, sin usar.

La entidad lleva desde noviembre recibiendo juguetes, tanto de particulares como de empresas y pequeños negocios, como las propias jugueterías, donde se han habilitados puntos de recogida. La campaña en los colegios también ha tenido muy buen resultado. Con todo, la Fundación calcula que a lo largo de este mes de diciembre entregará unos 5.000 juguetes en toda Galicia, por lo que si las donaciones no son suficientes, la propia ONG comprará los que sean necesarios para que ningún niño se quede sin sorpresa navideña.

En cuanto al tipo de juguetes, hay bastante variedad. Si bien "intentamos que no sean sexistas" -recalcan desde la entidad-, las muñecas suelen empaquetarse para las niñas y los coches para los niños, según admiten las personas que están envolviendo los regalos.

Pero los voluntarios -por ahora hay trece- solo se encargan de empaquetar los juguetes, sino también del trabajo previo, que consiste en la selección del artículo más apropiado a cada menor. En un listado se detallan los nombres de los miembros de cada familia, precisando el número de niños, su sexo y edad. En función de estos datos los voluntarios conforman el paquete. "Tenemos un poco de todo, pero lo que predominan son muñecas, peluches y coches", relatan Mercedes Pardo y Begoña Martínez.

"Elfos y Calcetines"

Aunque la campaña está dirigida a niños de 0 a 8 años, la colaboración con la asociación Elfos y Calcetines permitir que la franja de edad de los receptores de los regalos se amplíe hasta los 18 en determinados concellos (Vilagarcía, Cambados, Ribadumia, O Grove, Caldas de Reis, Porto do Son, Rianxo, Ribeira y Teo). Así, en torno a unos 400 escolares, además del regalo de la propia Fundación, recibirá otro a mayores. "Nosotros les pedimos una carta para que la escriban con lo que piden por Navidad y se la enviamos a Elfos y Calcetines. Cualquier persona puede hacerse elfo para donar un juguete que no puede superar los 30 euros de coste", explica una portavoz de Amigos de Galicia.

Las penurias económicas que atraviesan miles de familias en Galicia no solo les impiden encargar los regalos de Papá Noel o Reyes para los pequeños de la casa, sino que las comidas de estas entrañables fiestas también se les hacen un poco cuesta arriba, ya que en muchos hogares no hay nada especial que poner en la mesa. Amigos de Galicia también ha pensado en este aspecto, por lo que el paquete de alimentos mensual, además de arroz, pasta, legumbres, fruta, verduras, hortalizas, yogures, embutidos y carne también incluirá una pularda o un pollo fresco, así como productos navideños, como por ejemplo turrones.

La idea es que todas las familias que atiende la ONG puedan disfrutar de una cena de Nochebuena en condiciones. "En función del número de miembros de la unidad familiar, se entrega un pollo o más", precisan desde la Fundación.

En cuanto a los perfiles más comunes de los hogares a los que ayuda esta asociación están las familias monoparentales -sobre todo mujeres- con hijos a su cargo o personas dependientes, desempleados de larga duración con la prestación ya agotada, víctimas de violencia de género e inmigrantes sin recursos.

Aunque en la comarca de O Salnés este último colectivo no es numeroso, sí lo es en otras zonas y ciudades de Galicia, como por ejemplo Pontevedra. De hecho a la hora de realizar el reparto de juguetes en esta campaña navideña que se prolonga durante todo el mes de diciembre, los voluntarios son testigos del importante número de ciudadanos extranjeros por los nombres que figuran en los listados.