Una banda supuestamente bien organizada y especializada en este tipo de robos asaltó en la madrugada de ayer una depuradora de mariscos ubicada en el entorno de Ostreira y Laxe de Rons, en el Concello de O Grove, después de reventar la puerta de entrada.

Lo más llamativo es la forma de actuar de los asaltantes, que además de romper puertas y ventanas realizaron en las paredes interiores una serie de butrones con los que trataban de evitar las cámaras de vigilancia y los sensores de movimiento de la alarma.

Así lo confirmó la Guardia Civil, que investiga los hechos, al gerente de estas instalaciones, Esteban Castro, quien asegura que nunca había visto algo así.

Al parecer hace unos años ya habían robado en estas instalaciones situadas entre el barrio marinero de Virxe das Mareas y la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de O Grove.

Pero en aquellas ocasiones los asaltantes se llevaron diversas cantidades de marisco, mientras que "esta vez parece que solo venían a por dinero, aunque no había, y lo destrozaron todo", sostiene el empresario.

Sucede que "no pudieron llevarse nada, ni siquiera los ordenadores u objetos similares, y tampoco intentaron forzar la caja fuerte, pero aún así con su salvaje actuación causaron daños valorados en unos 4.000 euros".

Lo más llamativo, cabe insistir, es la realización de los butrones. "Fue algo muy extraño, aunque la Guardia Civil me dice que es un modo de actuar bastante frecuente", explica Esteban Castro antes de decir que "en lugar de moverse de unas dependencias interiores a otras a través de las puertas lo que hicieron los ladrones fue romper cristaleras y abrir los agujeros en las paredes de ladrillo para no ser detectados".