El Ayuntamiento de Cambados afronta el proceso de regularización de las concesiones de la plaza de abastos que se encuentran en situación alegal por diversas razones. En este sentido, los concejales Xurxo Charlín y María José Cacabelos se reunían anoche con los vendedores de la plaza en Exposalnés para explicarles los pasos que tienen que dar en lo sucesivo.

En la plaza de abastos de Cambados hay 70 puestos de venta, aunque el número de vendedores es menor, puesto que hay gente que cuenta con dos espacios asignados. De los puestos, medio centenar son de pescado, una docena de carne, y los demás están reservados para la venta de alimentos, flores o incluso un negocio de costura.

Según estimaciones del Concello, más de un tercio de estas concesiones están en situación alegal. Así, por ejemplo, hay casos de personas que están trabajando en las concesiones que se le asignaron en su día a un tío, o de otras que siguen vendiendo pese a que sus concesiones caducaron.

Xurxo Charlín explica al respecto la responsabilidad de esta situación es de los anteriores gobiernos del PP, pues según él no solo no hicieron los trámites pertinentes para regularizar las concesiones, sino que también actualizaron la ordenanza, "con lo que se había quedado completamente obsoleta".

Esta situación provocaba una sensación de incertidumbre entre muchos vendedores, que se veían trabajando en precario. Incluso temían que la construcción de la nueva plaza pudiese perjudicarles si en ese proceso se presentaban más aspirantes a ocupar una concesión y no se les renovaba a ellos automáticamente.

Así las cosas, en la reunión de ayer los concejales explicaron a los comerciantes los pasos que tienen que dar a partir de ahora para proceder a la regularización efectiva de sus negocios. Dispondrán de un plazo de al menos un mes para la presentación de sus solicitudes y de la documentación.

La nueva plaza

También estaba previsto que en el encuentro se abordase el estado de los trámites previos a la construcción de la nueva plaza de abastos. Se trata de un proyecto que tiene un presupuesto de más de dos millones de euros, pero que se está dilatando en el tiempo.

Para poder empezar las obras es necesario que Portos de Galicia redacte y someta a exposición pública un Plan Especial, pero hace ya casi un año que se comprometieron a llevarlo a cabo y todavía no hay novedad sobre él.

Está previsto que Portos y el Concello se reúnan el próximo 30 de enero para abordar precisamente el estado de esta tramitación.