Aunque el Atlantic Fest arranca este año, A Illa ya tiene experiencia de lo que supone acoger un festival de estas características. En los dos años anteriores, el Festival do Norte se asentó en el municipio, atrayendo a miles de personas en cada edición, muchos de los cuales, regresaron con posterioridad por el encanto y el paisaje que ofrece el municipio.

Así lo reconocía ayer el alcalde de A Illa, Carlos iglesias, antes de la presentación del festival, argumentando que "el retorno que ofrecen este tipo de eventos para un municipio pequeño como el nuestro es espectacular, porque es cierto que, en un primer plano, se encuentra el atractivo musical que ofrece el cartel de este año, pero también se le añade la posibilidad de dar a conocer a los participantes cual es nuestro paisaje".

Y es que el festival también se ha convertido en un evento de promoción turística de carácter internacional, en el que no solo quedan impresionados los festivaleros, sino también los grupos que participan en el evento, a los que se les ofrecen una serie de actividades, como son los viajes por la ría de Arousa a bordo de un barco bateeiro, que acaban dejándoles impresionados.

Impresionada también se mostró la presidenta de la Diputación, que no dudó en asegurar ante el paisaje que se abría ante sus ojos desde el Encar 1 que se sentía "emocionada de tener esta provincia", además de ensalzar a la organización por la "inteligencia y el dinamismo de convertir un evento musical en un acto de promoción turística inigualable".

Organizadores, patrocinadores y responsables de las instituciones brindaron ante el marco incomparable del faro de Punta Cabalo por una larga vida al Atlantic Fest y a su maridaje con uno de los puntos más atractivos de las rías gallegas, A Illa de Arousa.