Un vecino de la comarca arousana de nacionalidad colombiana se ha sumado a la lista de detenidos en el marco de la 'Operación Petra' desarrollada entre las localidades de Vilagarcía de Arousa y Asturias y en la que se han incautado un total de 7,4 kilogramos de cocaína, más de 250.000 euros en metálico, un arma y siete vehículos. En la lista de implicados aparece Javier Meis, conocido hostelero isleño asentado en Vilagarcía de Arousa y que fue detenido en el operativo desarrollado el mes de octubre.

Según ha informado el Instituto Armado, el operativo ha permitido "desarticular una organización criminal dedicada al tráfico de drogas en Asturias y de ese modo dejar "descabezado" el abastecimiento en toda la región, de manera específica en el centro.

Así lo han puesto de manifiesto este martes el teniente coronel, Luis Germán Avilés; el capitán de la Guardia Civil Víctor Leiva y el comandante Alejandro Anelo, que han indicado que con esta "compleja operación" se ha logrado "partir varios eslabones de la cadena de distribución de droga en Asturias que tardará tiempo en volver a montarse".

Operación Petra

Los agentes llevaban tiempo realizando un seguimiento a los presuntos narcotraficantes, sobre todo a raíz del conocimiento de una entrega anterior de cocaína que se habría realizado con el mismo modus operandi.

La titular del Juzgado de instrucción número 4 de Oviedo dirigía las investigaciones y había ordenado la práctica de escuchas telefónicas a los implicados. Mediante este procedimiento, los guardias tuvieron conocimiento de que se iba a producir una entrega el pasado domingo, día 11, en el pequeño núcleo de Carraspientes, cerca de Rioturbio (Mieres)

Ese día, los agentes interceptaron el vehículo en el que cuatro gallegos trasladaban la droga hacia el punto de encuentro, mientras en Carraspientes, los dos mierenses esperaban la llegada de los gallegos y comenzaron a ponerse nerviosos ante su tardanza, puesto que tenían fama de ser vendedores puntuales. Los compradores advirtieron la presencia de una furgoneta y pensaron que se trataba de los presuntos narcotraficantes que esperaban.

Su sorpresa fue mayúscula cuando, tras acercarse al vehículo, comprobaron que quienes estaban en el interior no eran los arousanos, sino varios guardias civiles que estaban monitorizando la entrega.

En ese momento emprendieron la huida, y trataron de ocultar los 240.000 euros que portaban, pero los agentes lograron encontrar el escondite y finalmente detuvieron a ambos, según la versión oficial.

Según ha explicado el capitán Leiva la operación ha requerido un arduo trabajo por parte de los agentes que la han desarrollado, ya que la banda desarticulada actuaba de manera meticulosa y con muchas medidas de seguridad para no ser detectados, lo que da idea de que llevaban tiempo operando entre el Principado y Pontevedra.

La operación se inició a principios de 2015 cuando se detectó la posible existencia de una organización criminal que se dedicaba a introducir cocaína y otras sustancias en Asturias y cuyos componentes residían en el Principado y la provincia de Pontevedra.