El Concello de Cambados conocerá, a finales de esta semana, el proyecto definitivo para la plaza de abastos. La alcaldesa socialista Fátima Abal, mantuvo en el día de ayer un encuentro con el equipo de arquitectos responsable del estudio para analizar la viabilidad de los cambios que se deben acometer en la obra, unas modificaciones que imponen tanto el Ministerio de Fomento, para ajustarse a las cantidades de inversión que se manejan, como Portos de Galicia, por el plan especial que se debe redactar para toda esta zona dependiente del ente de la Xunta.

"Los arquitectos van a realizar una serie de cálculos, en especial en lo que se refiere a cuestiones de seguridad, para ver si son viables los cambios que pretendemos introducir en el proyecto con el fin de ajustarse a lo que nos piden las otras administraciones", explicaba ayer la regidora.

El objetivo del grupo de gobierno es tener cuanto antes el proyecto en las manos para dar su aprobación inicial en el pleno, lo que permitiría agilizar los trámites para la obra, ya que Portos no pondría ningún tipo de inconveniente a comenzar con la remodelación. Eso significaría que la actuación podría comenzar a lo largo de este mismo año. La propia alcaldesa y miembros de su gobierno se reunieron recientemente en Madrid con altos cargos del Ministerio, un encuentro en el que se acordó reformular el proyecto ante su elevado coste, ya que Fomento solo puede invertir en la actuación 3,6 millones de euros.

Abal también respondió a las críticas del conservador Luis Aragunde sobre la eliminación del supermercado en el nuevo proyecto. Recuerda la regidora que se descartó por una serie de factores entre los que destacan el hecho de no existir una gran firma interesada en su explotación, y sobre todo, en que "Portos puso como condición para la redacción del Plan Especial la supresión del supermercado".

A ello se une que "las propias placeras son las que no quieren un supermercado en la planta superior, por lo que hemos apostado por reorientar ese espacio y apostar por algo diferente con el fin de no perder la inversión que se va a realizar en la nueva plaza de abastos".

Esa reorientación pasa por crear pequeñas tiendas y una zona de degustación que sirva para promocionar los productos de la villa del albariño. "Creemos que esta reformulación del proyecto puede servir para dar un beneficio económico que sirva para el propio mantenimiento de la plaza", explica la propia alcaldesa.