La Gerencia del Área Integrada Pontevedra-O Salnés adoptó la decisión de nombrar a Manuel Vázquez Lima, Tato Vázquez, como coordinador de Urgencias de Montecelo tras la renuncia de su jefe de servicio, José Ramón Parada Castellanos.

El cambio será efectivo el próximo 15 de diciembre, si bien el nuevo responsable la asume en comisión de servicios, durante los próximos seis meses. En ese plazo, la plaza saldrá a concurso y podrán optar a ella cualquier facultativo que considere que tiene méritos para cubrirla.

Entre tanto, al frente del servicio de Urgencias del Hospital de O Salnés se situará Luis Villaverde, un experimentado médico al que todos consideran mano derecha durante toda la trayectoria de Tato Vázquez.

El traslado del coordinador de Urgencias a Pontevedra llega en uno de los momentos más complicado para el Hospital de O Salnés cuando ni siquiera han comenzado las obras de ampliación del centro, uno de los pulsos que mantuvo Tato Vázquez desde que abrió el centro como Fundación Pública.

Ya en aquel momento, el diseño del servicio de Urgencias se vio inadecuado, aunque se creó para un promedio de 60 pacientes diarios, pues se habilitaba una sala de algo más de 500 metros cuadrados.

Al poco tiempo, se comprobó que las previsiones iniciales eran insuficientes, pues la media de atenciones prontó superó el centenar diario, con picos de 140 ingresos en algunos meses de invierno o de agosto. La falta de espacio fue suplida por el coordinador de Urgencias sobre todo con ingenio. Así fue promotor de iniciativas como el triaje de pacientes con los que se daba preferencia a las dolencias graves sobre las leves así como con un método que reducía a solo tres horas la permanencia de los enfermos en el servicio, incluyendo pruebas como análisis o radiografías.

Todo ello ha sido posible gracias al apoyo que en todo momento ha recibido Tato Vázquez de un equipo que desde un principio se dio cuenta de que las carencias solo se cubren con voluntad. Y hubo tanta que hasta los enfermos perdonaron la absoluta falta de intimidad.