La proyección de "Amelie", protagonizada por Audrey Tautou, enmarcaba la despedida del Gonviz en el verano del año 2001, sin un futuro definido, aunque todo apuntaba a su reconversión en un centro comercial.
Cuando se anunció el aterrizaje del grupo Inditex, mucha gente pensó con buena lógica que ocuparía las instalaciones de todo el cine. La decepción fue mayúscula al abrir sus puertas y comprobarse que únicamente disponía de la superficie destinada a entrada y el vestíbulo, además del sótano; es decir apenas un tercio del local, aproximadamente.
Esa utilización parcial del Gonviz se volvió en su contra y sigue constituyendo hoy un lastre insalvable para darle un uso nuevo a la zona interior que ocupaban las dos plantas del patio de butacas. Ni siquiera un proyecto de conversión en centro sociocultural de arte, cine, teatro y música, que el concejal de Urbanismo, Antón Louro, acogió con el mayor interés en 2014, pudo superar la normativa municipal anti incendio, que exige la disponibilidad de dos salidas al exterior por distintos lugares.
