Yo debía ser el único vigués que no había pasado por Casa Ríos, en Domaio, frente a la capilla de San Benito. Esta asignatura pendiente ya no lo es porque vuelvo de allí con la satisfacción del buen comer pintada en el rostro. Emilio Mosquera Miñán (yo crecí con la publicidad con su nombre rodeándome radiofónicamente), me citó allí con Rafael Lorenzo, que como almirante condujo el portaaviones Príncipe de Asturias y ayer me hizo el favor de conducirme a mí en su vehículo terrestre hacia ese destino culinario. Nuestro almirante, hijo y esposa de vigueses y con casa en Baiona, será el próximo protagonista de nuestras Memorias el domingo, 13, y allí estuvimos conjugando la suya con los manjares de la ría que nos puso Antonio, tan sencillos como contundentemente sabrosos.

Bienvenido, "Chocolate"

Emilio Mosquera me trajo recuerdos de Manolo Cores, el querido hostelero que acercó Galicia al mundo con su restaurante "Chocolate" de Vilagarcía, al que venía ayer de visitar creo que del nuevo hospital, donde está momentáneamente internado. Cores volverá pronto a sus posesiones arousanas, cuando se recupere de este achuche normal en un cuerpo de tan largo recorrido. Mientras no vuelve allá, bienvenido, "Chocolate", a este Vigo donde tienes tantos amigos y fieles ¡Te queremos, maestro!

Una cata con mucho sentido

En el restaurante Sentido Cocina, que ocupa con mucho sentido ese espacio de la Plaza de Compostela 27 que antes fue el chino más antiguo de Vigo, tuvimos cata de los vinos Altos de Torona Brut Nature, Altos de Torona Barrica de bodegas Altos de Torona y Finca La Capitana de bodegas Regina Viarum, o sea venidos de las tierras del Baixo Miño y Ribeira Sacra en que Horacio Gómez mejora cada cosecha sus caldos. Apuesta siempre fuerte el bodeguero. He de decir y digo que Yago González y Pablo Ibáñez, que son de las bodegas HGA, dirigieron esta cata con amenidad, evitando ese coñazo en que a veces se convierten estas experiencias gustativas. Por allí andaban la gastronómica Marian Priego, las blogueras Patricia Rico, Edurne Baines (también periodista) o Jorge Cardoso... La cocina del

En Chapela, con la Kimo Bay

Iba con Jaime López "Capitán" a comer a Casa Cándido de Chapela en la Avenida de Vigo, 119, y nos paramos en la cafetería Kimo Bay, emblemática ahí porque fue de las primeras del lugar. Recién renovada, nada se parece a la anterior, con ese ambiente de cervecería inglesa que la abre también a un público más joven de primera hora nocturna. El Kimo Bay exhibe hoy un despliegue fotográfico que le da calidez y lo convierte en espacio de memoria del barrio y de la ría con escenas que recogen desde la Batalla de Rande a la playa de Arealonga. Allí cerveceamos con Pepe y María Teresa López, hijos de quienes la cogieron en 1984 a sus anteriores propietarios, Quin y Manolo, dueños de la disco Diva en Redondela.