Sálveme Themis, diosa de la Justicia griega, o santo Tomás, patrono de los jueces, de hablar lo que no debo pero, como le pasa a muchos vigueses, me pregunto si no hay una vía que permita que el mercado de A Pedra pueda reabrirse, sin eludir las responsabilidades judiciales en curso tras la última redada, para que vuelva a recuperar la vida ese espacio tan turístico. Dicho de otro modo, que se puedan reabrir los 39 puestos cerrados y se permita volver a trabajar con productos legales a tantas familias afectadas. Ya se cumplen tres meses de cierre y esa zona del barrio viejo parece un desierto, un erial ¿De qué sirve, inerte, un espacio tan bien acondicionado para el comercio?
Vigo ante la Casa Blanca
Hace muchos años, turista yo de visita en Washington, me hicieron una foto ante un tipo extraño que me llamó la atención porque estaba acampado en una plaza ajardinada ante la Casa Blanca, en señal de protesta por algo que no recuerdo. Ahora, décadas más tarde, me entero de que no era un tipo sino una mujer (estaba de espaldas) y que no era un americano protestón sino una oriunda de Vigo nacionalizada estadounidense que sigue allí asentada y cuyo estado mental había puesto en duda su ex marido en la prensa. Se llama la eterna protestante Concepción Martín Picciolo,¿alguien sabe cuál es su ascendiente vigués?
Un dúo en bullicio creativo
Hace tiempo que no coincido con Teresa Vázquez, la galerista que tan buenos oficios ha desempeñado en el arte con galerías viguesas como Alameda o TriArt. Vuelvo a hablar con ella y me cuenta, admirada, de la exposición que hasta el 31 de enero muestran los vigueses Marta Armada (diseñadora de joyas) y quien fue su profesor de Cerámica en la Universidad Popular, Miguel Vázquez, en la sala Arcana de Vilagarcía de Arousa. "Cuando dos universos se unen entre si, compartiendo su existencia, se crea una sinergía. Es el caso de los dos, la exalumna, y el profesor, dos grandes de la cerámica. Cada uno con su lenguaje y a través de la investigación marcan su propio territorio en un ambiente de diálogo. Véte a ver esa exposición", me dice Teresa.
Una vieja librería que se va
Corre el triste rumor, que casi es certeza, de que la librería de Rafael Rodríguez, junto a la iglesia Colegiata, va a cerrar sus puertas definitivamente, quizás porque no le renuevan el contrato. Si eso ocurre, el barrio viejo perderá uno de sus pocos espacios de cultura mientras aumenta los de comer y beber . Si tan nefasta noticia es cierta (y creo que lo es) quedará en la memoria una librería inaugurada hace unos 70 años, que en los años 40 y 50 tenía 18 repartidores, abierta por Rafael R. Roddriguez (fallecido hace 7 años) y Jesusa Teodora (la "señora de los santos", que se nos fue hace uno), que ahora lleva su hijo Rafael y en la que conviven las imágenes de santos con los libros, las hadas o el mejor merchandising de Tintín. Si ocurre, perderemos esa visión de entrañabilidad cultural y religiosa que daban sus escaparates impregnada en la retina de los vigueses.
