El viceprimer ministro turco Nurettin Canikli calificó ayer de "inaceptable" el plan anunciado el martes por EE UU de entregar armamento pesado a la guerrilla kurda de Siria, las Unidades de Defensa Popular (YPG), para intensificar la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI), en particular en su feudo de Raqqa. Turquía considera a las YPG un grupo terrorista por su vínculos con el Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda presente en Turquía.

El secretario de Defensa de EE UU, James Mattis, garantizó a su homólogo turco, Fikri Isik, que el apoyo ofrecido a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) será "limitado" y se circunscribirá a la liberación de la capital siria de los yihadistas.