El Reino Unido anunció ayer su renuncia a la presidencia de turno del Consejo de Ministros de la UE que le correspondía ejercer en 2017. La primera ministra británica, Theresa May, comunicó su decisión al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en una conversación telefónica que ambos mantuvieron el martes, informó Downing Street.

La jefa de Gobierno "tory" asumió el poder hace una semana, una vez que su predecesor, David Cameron, dimitió a raíz del resultado del referéndum del pasado 23 de junio, en el que la opción de la salida, el "Brexit", venció a la de la permanencia por cuatro puntos de diferencia.

El Reino Unido tenía que hacerse cargo de la presidencia semestral rotatoria en la segunda mitad de 2017, pero May ha optado por no asumir su turno, dado que los británicos respaldaron por mayoría abandonar el bloque de los todavía Veintiocho.

Según Downing Street, May le dijo a Tusk que renunciar a la presidencia de turno era la medida "correcta", puesto que el año que viene el Gobierno británico estará centrado en las negociaciones para consumar el divorcio con Bruselas. Y renunciando ahora se da tiempo a otro país a prepararse para asumir el turno que debía ejercer Londres.

Bélgica se ofreció a hacerse cargo del semestre británico. "Estamos listos para asumir la presidencia en la segunda mitad de 2017 si es necesario", subrayó el portavoz del Ministerio de Exteriores belga, Didier Vanderhasselt. Sin embargo, al final será Estonia quien rija los destinos del Consejo de Ministros de la UE en la segunda mitad del año que viene. Los embajadores de los Veintiocho acordaron con "amplio apoyo" correr el turno: a Estonia le tocaba presidir en el primer semestre de 2018.

Artículo 50

La del martes es la primera conversación telefónica que May y Tusk mantienen desde que la primera asumió el poder en el Reino Unido. May aún no ha dicho cuándo invocará el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que establece un periodo de negociación de dos años sobre los términos de la retirada de un país miembro.

Al asumir el cargo, la política "tory" dejó claro que su Gobierno cumplirá la voluntad democrática del pueblo británico de salir de la UE. Para ello, la primera ministra ha nombrado al diputado conservador y probado euroescéptico David Davis ministro para la salida británica de la UE, encargado de las futuras negociaciones con la UE sobre la ruptura con Bruselas. Un equipo para hacer realidad el "Brexit" que se completa con la elección, para el Ministerio de Exteriores, de uno de los más firmes defensores de la ruptura, el exalcalde de Londres Boris Johnson.

Davis ya ha indicado que el Reino Unido podría invocar ese artículo a finales de año o principios de 2017. Y fuentes de Downing Street señalaron que May no tiene intención de activar el artículo hasta que haya consultado con las administraciones autonómicas de Escocia, Gales e Irlanda del Norte.