Al menos 31 personas murieron y otras 28 resultaron heridas por el estallido de una bomba durante un funeral en la provincia de Diyala, al noreste de Bagdad, informó a Efe una fuente de seguridad.

El artefacto explotó entre los asistentes al entierro de un profesor universitario en el cementerio Al Sharif, ubicado en el este de Baquba, capital de Diyala.

Entre las víctimas mortales hay estudiantes y profesores universitarios, y entre los heridos hay diez en estado de extrema gravedad.

Las fuentes explicaron que el alto número de heridos se debió a que la bomba contenía mucha metralla.

Por otra parte, la fuente reveló que siete civiles, entre ellos una mujer, sufrieron heridas por el estallido de un coche bomba en las proximidades de un mercado de verduras al por mayor, ubicado unos 30 kilómetros al noroeste de Baquba.

El atentado causó grandes destrozos en tiendas y viviendas, mientras que otro ataque similar causó heridas a tres personas en la localidad de Kanann, al este de Baquba.

Estos nuevos sucesos coinciden con una amplia ofensiva del yihadista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) en varias provincias iraquíes, entre ellas Nínive, que fue tomada por los extremistas, y Al Anbar, donde el pasado sábado capturaron durante unas horas a cientos de rehenes en la universidad de Ramadi.

Irak afronta un aumento de la violencia confesional y de los atentados terroristas, que causaron en 2013 la muerte de más de 8.860 personas, de las que 7.818 eran civiles, según un recuento de las Naciones Unidas.