El dirigente opositor Leopoldo López reiteró ayer su convocatoria a marchar hoy en Caracas hasta el Ministerio del Interior y Justicia (MIJ), una invitación que confirmó pese a que el alcalde del Municipio Libertador, el oficialista Jorge Rodríguez, negó la autorización a la movilización.

"Venezolanos, vengan a CCS (Caracas) mañana (por hoy). Marcharemos al MIJ desde Chacaíto. Está notificada. No necesitamos permisos. Los derechos no se negocian", escribió en Twitter López, que tiene una orden de aprehensión en su contra.

López, sin embargo, cambió el punto de partida de la marcha, pues el domingo pidió partir desde la céntrica Plaza Venezuela, ubicada en el Municipio Libertador, y ahora partirá desde Chacaíto, municipio de Chacao, donde gobierna la oposición.

"Lo repetimos, no queremos confrontación. Por eso cambiamos la concentración de Pza Venezuela a Chacaíto, pero vamos a llegar al MIJ!", escribió en la red social.

López, que tiene una orden de aprehensión en su contra desde la noche del miércoles, señaló que irá al MIJ "para dar la cara" y pidió a sus seguidores que le acompañen vestidos de blanco para demostrar el "compromiso con la paz" hasta un punto desde el que caminará solo.

El alcalde de Libertador (centro-oeste de Caracas), advirtió ayer de que la marcha convocada por López para ir a la sede del Ministerio del Interior y que está ubicada en el territorio que dirige no está autorizada.

"No nos han solicitado absolutamente ningún permiso, por tanto, no hay ninguna manifestación autorizada para el día de mañana", señaló Rodríguez en rueda de prensa.

El domingo, el presidente, Nicolás Maduro, pidió a Leopoldo López que acepte la mediación de la Fiscalía y se entregue "sin shows", asegurando que hay planes de ultraderecha de matarlo para generar una crisis política.

Un tribunal de Caracas cursó orden de aprehensión contra López acusándole entre otros cargos de homicidio y terrorismo, tras los enfrentamientos que se produjeron al término de una manifestación de en Caracas el pasado miércoles en incidentes que dejaron tres muertos y decenas de heridos.

Por otra parte, el Gobierno de Nicolás Maduro lanzó duras acusaciones a Estados Unidos inculpándole de estar detrás de la violencia que ha empañado las marchas pacíficas en Venezuela, que ayer vivió una jornada de relativa calma con manifestaciones de mucha menor intensidad que en días precedentes y las ya repetidas concentraciones en el este de Caracas por parte de estudiantes y opositores.

Sin embargo, tras las acusacionesdel presidente, Nicolás Maduro, contra el Gobierno de Barack Obama, el canciller venezolano, Elías Jaua, indicó ayer que los diplomáticos estadounidenses Breeann Marie McCusker, Jeffrey Gordon Elsen y Kristofer Lee Clark tienen 48 horas para abandonar el país.