El oligarca ruso Boris Berezovski murió ahorcado, según los primeros resultados de la autopsia divulgados por la Policía, que ha indicado que no hubo "violencia".

El cuerpo del empresario fue hallado el sábado en el cuarto de baño de su casa en Ascot, cerca de Londres, por un empleado suyo.

De acuerdo con la Policía del Valle del Támesis, fuerza a la que pertenece Ascot, no hay pruebas de que otra persona estuviera "implicada" en su muerte y los exámenes forenses no indican que el oligarca se enfrentase a una situación de violencia.

No obstante, las fuerzas del orden han informado de que el cuerpo de Berezovski será sometido a otras pruebas, como toxicólogas, que durarán varias semanas, mientras que los agentes continuarán con el registro de la vivienda del empresario.

La Policía no ha aportado más detalles sobre el resultado de la autopsia practicada ayer.

"El cordón (policial alrededor de la casa) se mantendrá hasta que quede completado el trabajo (forense) a fin de proteger el lugar", señaló el inspector jefe Kevin Brown.

Berezovski, que estaba exiliado en el Reino Unido desde el 2000, era conocido por sus críticas contra el presidente ruso, Vladímir Putin, y sus enfrentamientos legales contra el multimillonario ruso Roman Abramóvich, dueño del club de fútbol inglés Chelsea.

Los medios británicos han afirmado que el empresario estaba deprimido tras haber acumulado deudas por una disputa legal con Abramóvich, por lo que no se ha descartado el suicidio.

El año pasado, Berezovski perdió una batalla legal contra Abramóvich, al que acusó de haberle "intimidado" para que vendiera sus acciones en la petrolera rusa Sibneft por una "fracción" de su valor real, pero esto fue rechazado por el Tribunal comercial de Londres.

La pérdida de esta disputa judicial supuso un duro golpe financiero para Berezovski pues tuvo que hacerse cargo de los cuantiosos gastos legales de Abramóvich.

El oligarca ruso, matemático en la era soviética y amigo de la familia de Yeltsin, había iniciado su carrera empresarial con un concesionario de coches, pero después, con la llegada de Putin al poder, huyó a varios países y se estableció en el Reino Unido, donde compró propiedades en barrios exclusivos de Londres y sus alrededores. EFE