Las autoridades estadounidenses detuvieron a un pasajero de nacionalidad nigeriana de un vuelo de Northwest Airlines procedente de Amsterdam con destino a Detroit, que cubría la misma ruta en la que el viernes otro nigeriano intentó detonar sin éxito un explosivo.

El piloto del avión solicitó ayuda de emergencia ante el comportamiento irregular de uno de los pasajeros, que actuó de forma desproporcionada después de que la tripulación le increpase por permanecer demasiado tiempo en el baño del avión.

El Departamento de Seguridad Nacional concluyó tras entrevistar al pasajero que éste se había sentido enfermo, lo que explicaría su prolongada estancia en el baño y determinó que no representó una amenaza.

El avión procedente de Amsterdam fue rodeado de forma inmediata por equipos de bomberos y la policía tras su aterrizaje en una zona remota del aeropuerto de Detroit (Michigan).

Las aerolíneas estadounidenses permanecen en situación de máxima alerta después de que el viernes un ciudadano nigeriano de 23 años, Umar Farouk Abdulmutallab, intentase detonar un explosivo que llevaba adherido al cuerpo en la misma ruta en la que hoy se registró el incidente.

Abdulmutallab pasó también un periodo de tiempo largo en el baño del avión en un aparente intento por activar el explosivo que portaba.

Un portavoz de Delta Airlines, que opera el vuelo de Northwest, aseguró que los 246 pasajeros del avión de hoy están bien.

El Gobierno de Estados Unidos extremó hoy la seguridad en los aeropuertos del país y anunció que revisará su política de listas de sospechosos de terrorismo y los sistemas de detección de los aeropuertos tras el atentado fallido del viernes.