El presidente electo de EE UU, Barack Obama, advirtió ayer de que la economía afronta una crisis de "dimensiones históricas", al delinear un plan para crear 2,5 millones de empleos para 2011, mientras continúa esculpiendo su equipo económico. La atención mediática se centró ayer en el posible nombramiento de Timothy Geithner, presidente de la Reserva Federal de Nueva York, como próximo secretario del Tesoro.

Fuentes allegadas al equipo de transición prevén que Obama presente a su equipo económico el próximo lunes en Chicago (Illinois), con la idea de agilizar sus planes para la reactivación económica.

El equipo económico incluiría además a Jacob Lew, director de presupuestos de la Casa Blanca bajo la presidencia de Bill Clinton, como próximo director del Consejo Nacional Económico, y Peter Orszag, actual jefe de la Oficina Presupuestaria del Congreso, como próximo titular de la Oficina de Gestión y Presupuestos (OMB) de la Casa Blanca.

También se baraja el nombre de Larry Summers, ex secretario del Tesoro, como posible asesor de alto rango en la Casa Blanca, junto con el economista Austan Goolsbee, de la Universidad de Chicago, y Jason Furman, un reconocido experto político de Washington. Para Obama, que jurará como el 44 presidente de Estados Unidos el próximo 20 de enero, no hay tiempo que perder ya que, según los expertos, la hemorragia de "millones de trabajos" continuará en 2009 si no se actúa "con rapidez y contundencia".

La crisis, según afirmó en su discurso radiofónico de los sábados, "posiblemente empeore", y está claro que con su plan para la creación de 2,5 millones de empleos para enero de 2011 intenta devolver la confianza tanto a los mercados como a los consumidores.

En ese sentido, ha ordenado a su equipo de asesores económicos que elabore un "Plan de Recuperación Económica" que sea "lo suficientemente grande para responder a los retos" de Estados Unidos. Su idea es crear trabajo mediante la reconstrucción de puentes y carreteras, la modernización de las escuelas y el desarrollo de fuentes alternativas de energía y de vehículos más eficientes. Estas y otras medidas son, a juicio de Obama, una "prima inicial" para el tipo de reforma que su Gobierno traerá a Washington.

Bush lanza un llamamiento a favor del libre comercio

El presidente de EE UU, George W Bush, hizo ayer un firme llamamiento contra el proteccionismo y a favor del libre comercio, la fuerza que, según él, ayudará a recuperar la confianza en la economía y resolver la crisis.

Bush intervino ayer ante altos ejecutivos y empresarios de países miembros del foro de Cooperación Económica Asia Pacífico que se celebra en Lima. En su discurso advirtió contra la tentación de una regulación excesiva para hacer frente a la crisis.

El presidente saliente, que abandonará el poder el próximo 20 de enero, afirmó que "es esencial que los Gobiernos resistan la tentación de reaccionar de modo desmesurado e imponer regulaciones que ahoguen el crecimiento económico".

La mayor amenaza a la recuperación económica, sostuvo Bush, que insistió en que hacer frente a la crisis debe ser una tarea en la que colaboren todos los países, no es el que los Gobiernos se desentiendan, sino "una implicación excesiva".

Las bases para la recuperación, insistió Bush, cuyo viaje a Lima es salvo imprevistos el último que realizará al extranjero como presidente, son "los mercados abiertos, el libre comercio y la libertad de la gente". "En un mundo interconectado, las ganancias de un país ayudan a hacer avanzar los intereses de todos", sostuvo.