El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, analizó hoy con el titular de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, el balance del plan especial puesto en marcha en agosto pasado, después de que en Galicia la siniestralidad en las carreteras no sólo había mejorado con la implantación del carné por puntos, sino que los datos habían empeorado.

Según los datos aportados por el ministro, entre enero y agosto del pasado año la cifra de víctimas había aumentado un 4,4 por ciento aunque, a partir de reforzarse la seguridad, entre agosto y diciembre se registraron 29 muertos menos, lo que supuso un descenso del 22,3. En conjunto, en el pasado año el número de fallecidos se redujo un 7,7 por ciento, y el de los mortales en un cuatro.

El ministro insistió en que este año se reforzará el plan especial puesto en marcha en agosto que, en síntesis, supuso que se pusiese más medios, como la incorporación a Tráfico de guardias civiles inicialmente no destinados a este servicio, así como potenciación de la vigilancia y control de alcoholemia y la velocidad.

Este año el reforzamiento supondrá que se incorporen en torno a 50 nuevos guardias así como otros 7 radares móviles que se irán repartiendo en 18 puntos de diferentes vías.

Pérez Rubalcaba, además, elogió el "excelente" plan de seguridad viaria de Galicia elaborado por la Xunta que, dijo, se pondrá de ejemplo para que lo apliquen las autonomías que carecen de él, e indicó a este respecto que el responsable de Tráfico, Pere Navarro, presente en el acto, actúa de "embajador" del proyecto del Gobierno gallego.

"Lo hemos convertido en nuestro plan piloto", afirmó el responsable de Interior, para quien "se puede copiar, no pasa nada", e insistió en que están intentando convencer a las autonomías que carecen de un plan específico que lo adapten a sus características y lo apliquen.

El ministro expresó su satisfacción por que con el plan puesto en marcha el pasado verano "hemos ahorrado un número importante de vidas", las 29 personas menos que fallecieron respecto al año anterior.

"Cuando las cosas se hacen bien, sabemos hacerlas", dijo el ministro, para quien la siniestralidad vial "no es una maldición", sino que se puede combatir con medios, leyes y coordinación apuntó Rubalcaba.

Sin embargo, afirmó que no se puede "bajar la guardia", por lo que reiteró que Interior mantendrá el plan este año y se reforzarán los medios materiales y humanos.

Mientras, el jefe del Ejecutivo gallego recordó que el plan de seguridad vial de la Xunta recoge 74 medidas concretas, un presupuesto de 2.800 millones de euros entre 2006 y 2010, insistió en que mejorar la siniestralidad en carretera es "un objetivo de país", para lo que las administraciones y los ciudadanos deben ser "activos y beligerantes".

Además, Pérez Touriño destacó las cifras dramáticas que para Galicia suponen los accidentes de tráfico, ya que desde 1981 hasta 2005 murieron en carretera más de 12.000 personas, 488 cada año y 41 al día. No obstante, insistió en con que las medidas implantadas por la Xunta y el Gobierno "vamos a dar la batalla y la vamos a ganar".