Las elecciones a las juntas generales de las cofradías gallegas, que el sábado se celebraron simultáneamente en todos los pósitos gallegos por primera vez en la historia, provocaron la primera gran sorpresa. El presidente de la Federación Galega de Confrarías, e histórico patrón mayor de Cambados, Benito González Sineiro, dejará los dos cargos si la fase de recursos a las proclamaciones de candidatos provisionales confirman los resultados del sábado. González optaba, como muchos otros patrones mayores, a la junta general de Cambados, desde la que luego pretendía optar a la reelección como patrón y obtener los apoyos necesarios a presidente de la federación gallega. El censo cambadés tenía que escoger a 24 vocales y González Sineiro no obtuvo los votos suficientes. La participación fue en su pósito de las más altas de Galicia, del 87% en unas elecciones en las que 12.859 electores tenían que designar a 992 vocales de las juntas.

La sorpresa de Benito González no fue la única. En Ferrol, el actual patrón mayor, Rubén Ferrer, tampoco logró los apoyos suficientes para entrar en la junta general y optar desde ella al puesto de patrón mayor, y la candidatura del cedeirense Agustín Pérez fue invalidada por un recurso presentado por la corriente crítica, que le acusó de llevar más de un año desvinculado de la pesca.