Un proyecto cuyo borrador final podría estar terminado a final de año y convertirse en realidad en el año lectivo 2018/2019. Tras más de dos décadas, la zonificación que distribuye los alumnos por los diferentes centros de la ciudad dará un giro de 360 grados, al igual que los cambios demográficos en la urbe con el paso de los años. El nuevo mapa escolar rompe con las zonas escolares actuales (trece de Educación Primaria y ocho de Enseñanza Obligatoria) y aboga por la creación de cuatro grandes áreas -centro, norte, este y sur- que darán cabida a un total de 1.553 aulas. ¿El propósito? Reducir los desplazamientos del alumnado hasta los institutos que por zona les corresponderían y también captar mayor estudiantado en la periferia, donde baja la natalidad repercutió de forma notable en la matriculación, y en consecuencia en las unidades o clases de cada centro, de modo que si las reducidas zonas actuales se amplían pueden captar a más alumnos.
Así lo explicó el titular de la Jefatura territorial de Educación, César Pérez Ares durante la comisión técnica conformada por directores de centros públicos de Primaria, Secundaria y centros concertados o privados a demás de seis inspectores de Educación en la que se planteó el primer borrador de este nuevo proyecto, que aspira a ponerse en marcha de forma "progresiva" al inicio del próximo curso escolar. "Asumimos este reto a petición de Foampas pero entendemos que debe ser una zonificación global; ni por barrios ni por zonas. Es un proyecto progresivo, los alumnos no se verán perjudicados, se irá implantando año a año respetando siempre lo que ya esta establecido y a los que tengas hermanos en sus centros", explicaba Pérez Ares.
La revisión de la zonificación escolar nace de la necesidad de adaptarse a las nuevas circunstancias geográficas y al crecimiento poblacional. Los habitantes más jóvenes de la ciudad se han desplazado, en especial, a zonas como Navia y A Miñoca, mientras que están desapareciendo de otras como Valladares. Esto provocaba que los cuatro institutos que por ubicación corresponderían a las dos primeras zonas estuvieran colapsados mientras que en el centro de Educación Secundaria de la periferia sobrarían plazas.
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Con esta nueva ordenación se amplían las posibilidades de elección o asignación de centro, evitando tener que desplazarse hasta 10 kilómetros al centro educativo, como ocurre en alguna zona. Así, los estudiantes de Navia y A Miñoca, por ejemplo, duplicarían los institutos a los que podrían acceder. La zona norte es la que mayor unidades de Infantil, Primaria y Secundaria agolpa, con un total de 455, seguido por la zona sur con 442, la zona centro con 428 y cerraría la adscripción la zona este con 228 aulas. En este proceso de unificación los Institutos de Educación Secundaria cumplen con un papel fundamental, ya que cada una de las cuatro grandes zonas contará con "uno o dos" centros de la E.S.O. de referentes. "Estas áreas son mucho más amplias, por lo tanto la oferta educativa también crece sin olvidar de los servicios que tienen actualmente los alumno ya sea comedor o transporte; nadie va a salir damnificado con esta nueva zonificación", asevera. Otra de las pretensiones que ansía este ambicioso proyecto, tal y como explicó el jefe territorial, es lograr una "mejor distribución de los ratios de cada centro en beneficio de la calidad educativa". Para lograrlo se respalda que el número de alumnos por clase no supere los 20 y no baje de los 15, baremo "óptimo" para lograr un incremento de la calidad educativa.
Pérez Ares hizo hincapié en que la zonificación escolar solo afecta a las familias que, después de solicitar plaza en el centro "que ellos elijan" la matrícula ya estaría completa. De modo que atendiendo al "trabajo" o "domicilio" familiar se determina a qué centro debe acudir el alumno. ¿Qué criterios lo dirimen? Principalmente la racionalización de la oferta educativa, es decir, equilibrar las matriculas en los institutos. El jefe territorial señala también el factor de la continuidad y reorganización desde Educación Infantil hasta Primaria, de modo que "un padre conozca en cada etapa educativa del hijo el centro que le correspondería, tanto en primaria como en la ESO".
Consenso educativo sobre el nuevo mapa escolar de Vigo
Este borrador presentado ayer si bien está en una fase avanzada, todavía tiene que pasar por varios filtros para regularizar su puesta en marcha y también ser aprobado por la comunidad educativa en particular. Foampas y el consello escolar municipal podrán realizar alegaciones sobre este proyecto. "Sabemos que no será fácil, pero era un cambio muy necesario, la zonificación tenía que cambiar", esgrime también el presidente de los directores de colegios públicos de Vigo, Ramón Méndez, que aúna a cerca de medio centenar de centros.
