Alegaron estar de mudanza cuando en realidad habían desvalijado un piso de la calle Manuel de Castro. Sobre las 23 horas, un vecino alertó a la Policía Local de que había visto a varios jóvenes acceder a un camión de lavandería aparcado en la calle y extraer varias bolsas. Los agentes realizaron una ronda por la zona hasta "pillar" in fraganti a tres chicos que portaban toallas y varios muebles. Al inquirirles sobre la procedencia de los objetos, respondieron que estaban de mudanza.

Para más detalle, uno de ellos explicó que el mobiliario se lo había cedido el propietario de una vivienda de la zona, e incluso llegó a ofrecer los datos necesarios para su identificación. Una vez desplazados al piso del joven, los agentes pudieron comprobar que en su interior se hallaban varias toallas idénticas a las que transportaba el camión asaltado, así como más muebles, presumiblemente trasladados momentos antes.

La Policía localizó a la actual inquilina del piso desvalijado, quien reconoció el mobiliario como suyo e identificó a su casero, coincidiendo los datos con los facilitados por uno de los detenidos. La mujer señaló que eran de su propiedad una televisión, un deshumidificador, una placa de vitrocerámica, una minicadena de música, un taladro, una plancha del pelo, un caso de moto e incluso un sofá que había quedado en plena calle. Además, relató que esa misma tarde, al salir de su casa no había podido cerrar bien la puerta debido a unos palillos colocados en la cerradura.

Por todo ello, se procedió a detener acusados de un delito grave de hurto a los tres jóvenes: D.L.M. de 21 años y vecino de Vigo, y J.A.R.T. y S.M.V.G., ambos de 20 años, extranjeros y residentes en la ciudad. Además, se les intervinieron 200 pastillas de metadona y una báscula.