El Parque Nacional Illas Atlánticas, principal valedor del archipiélago de las Cíes, ha denunciado ante la Consellería de Medio Ambiente a cuatro navieras por exceso de pasajeros. El cupo de visitantes es de 2.200 al días, a fin de preservar la biodiversidad del entorno.

Desde la Consellería de Medio Ambiente confirman que durante el año 2017 se han abierto 26 expedientes, de los cuales seis se inciaron entre los días 3 y 5 de agosto por exceso de visitantes. Los otros 20 se refieren a otro tipo de cuestiones como incumplimientos de horarios o falta de información.

A la espera de que le sea comunicado a las firmas afectadas, lo cierto es que el año pasado ya la Xunta multó con 12.000 euros a una firma por vender más billetes de lo permitido.

Este verano ya recibieron otro aviso respecto al incumplimiento de horarios. En este caso fueron los propios usuarios de Cangas quienes hace apenas una semana advertían de que los transportes no se ajustaban a la hora programada.

La normativa establece que cada jornada se pueden expedir un máximo de 2.200 billetes (200 para excursiones). Ese "tope" busca preservar la riqueza medioambiental de Cíes. Al no hacerlo se ocasiona un doble daño al Parque Nacional: el más grave lo padece el archipiélago, cuyo frágil ecosistema se somete así a una presencia masiva de turistas; pero también señalaba la "mala imagen" que se transmite a los visitantes, tanto por parte de la Xunta, titular del territorio, como de las propias navieras. A esas 2.200 personas se suman las 800 que pueden estar en el camping, otro de los grandes atractivos que ofrecen las Cíes.

No respetar esa norma puede acarrear multas de entre 6.000 y 10.000 euros. A pesar de ese severo castigo, en 2015 volvieron a descubrirse cerca de un millar de billetes vendidos de más "durante varios días" por parte de al menos dos de las seis navieras autorizadas.