Cinco jóvenes -cuatro varones y una mujer-, aceptaron penas de prisión por estafar casi 6.000 euros de varias máquinas de apuestas deportivas de la ciudad al sustraer de las mismas el dinero que invertían en cada apuesta y que luego anulaban para doblar así sus beneficios ya que los dispositivos no se encontraban cerrados correctamente. Tres de los acusados, A.V.F., C.C.V. y C.F.Y. reconocieron durante la vista que se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal 2 de Vigo los hechos ya durante el proceso de instrucción y abonaron a los perjudicados gran parte de la cuantía sustraída, por lo que la fiscal redujo su petición de prisión de los 2 años y medio a los 5 meses y 15 días para cada uno por un ilícito de estafa continuada.

Por su parte, los otros dos encausados, H.O.F. y F.S.B. solo fueron partícipes de una de las estafas en las que cobraron tickets por valor de 830 euros, por lo que se les fijo una pena de 6 meses de cárcel por un delito de estafa. Los jóvenes aceptaron las penas tras llegar a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía. Por su parte, y al carecer de antecedentes, los varones y la mujer no tendrán que cumplir con la condena privativa de libertad que le quedaría suspendida.

Los hechos se remontan a los días 24 y 25 de enero del año pasado. Los cinco acusados acudieron a un local de apuestas deportivas a sabiendas que una de sus máquinas no contaba con la tapa trasera bien ajustada, por lo que sería sencillo poder acceder a la tolva de recogida de dinero, lugar en el que quedan almacenados los ingresos que cada usuario realiza en cada apuesta. De este modo, puestos los cinco jóvenes "de común acuerdo" y con el propósito de "obtener un ilícito beneficio patrimonial a costa de lo ajeno" se colocaron junto a la máquina que sabían no estaba correctamente cerrada generaban tickets de apuestas que sin embargo no abonaban ya que una vez introducido el dinero y generada la apuesta, accedían a la tolva de recogida del efectivo y lo recuperaban, tal y como lo recoge el fiscal en su escrito de acusaciones.

Varios establecimientos

Así, una vez que llegaban a la cantidad que ellos estimaban suficiente, renunciaban a la apuesta y solicitaban la devolución de lo ingresado, cantidades que, para no levantar sospechas, fueron retiradas en otros establecimientos de Vigo durante los mismos días de enero. De esta forma, los acusados llegaron a cobrar tickets de apuestas por un importe mínimo de 150 euros y máximo de 800 euros hasta llegar a un sumar un total de 5.890 euros, cantidad reclamada por uno de los propietarios afectados y que ya fue abonada por los encausados.

Esta reparación del daño junto con el reconocimiento de los hechos por parte de los cinco jóvenes fueron las atenuantes que aplicó la fiscal durante la vista para rebajar las condenadas solicitadas que inicialmente eran de dos años y medio para cada uno.