Empresarios, constructores, promotores, arquitectos, economistas hosteleros, vecinos, taxistas? Las bautizadas como fuerzas vivas de la ciudad aplauden el acuerdo alcanzado el jueves por Xunta, Concello y Adif para desbloquear los accesos a la futura estación intermodal. Celebran el clima de entendimiento entre las tres administraciones, más allá de los colores políticos, y abogan por que el pacto sirva de impulso definitivo para la mejora global del acceso de la AP-9 en la ciudad. El nuevo túnel entre la calle Lepanto y la AP-9 -acordado por los gobiernos municipal, autonómico y estatal- permitirá derribar lo que queda del viejo scalextric, un paso que los colectivos consultados por FARO esperan que sea el primero para mejorar los cerca de cuatro kilómetros de autopista entre Teis y el corazón del casco urbano. Desde varias hace décadas los miles de vigueses o visitantes que entran o salen de Vigo por la AP-9 lo hacen a través de un corredor desangelado, flanqueado por taludes y que genera un serio problema de contaminación acústica a las casas más próximas.

"Debería haber un proyecto conjunto que englobase todo el acceso de la autopista, aunque después haya que desarrollarlo poco a poco", propone el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de la Construcción (APEC), José Luis Campos, quien pide a las administraciones "un planteamiento ambicioso, de conjunto". El proyecto -abunda- ayudaría también a generar empleo en el sector, uno de los más castigados por la crisis. "Una actuación global sería lo ideal, lo que a todos nos gustaría ver".

Desde el Colegio de Arquitectos de Vigo, su decano, Antonio Davila, coincide en la necesidad de ir más allá de la solución acordada por Concello, Xunta y Adif para agilizar el tráfico entre Lepanto y la autopista. "Se podía aprovechar para hacer una solución un poco más global", plantea el representante de los arquitectos vigueses tras recordar que el soterramiento del tren gracias a la construcción de la terminal de ferrocarriles de Mayne "ha dejado bastantes terrenos libres en superficie". "En general los accesos a Vigo, desde Avenida de Madrid o la autopista, son bastante deprimentes", lamenta Davila, para quien el nuevo túnel de Lepanto y una reforma de la entrada de la AP-9 serían "en beneficio de Vigo".

El decano del Colegio de Economistas, Juan José Santamaría, celebra también el entendimiento que mostraron el jueves Concello, Xunta y Adif: "Debería cundir el ejemplo y generalizarse para el resto de asuntos que tenemos pendientes". Sobre la mejora del acceso de la autopista, apunta que facilitar la entrada en Lepanto y mejorar la integración de la AP-9 en la ciudad -adecentando el tramo existente- "dinamizaría" todo el entorno. En esa misma línea propone recuperar las antiguas vías del ferrocarril que atraviesan Teis, ahora "infrautilizadas". "Ahí puede haber un paseo, un carril bici... puede convertirse en una zona recreativa".

"Todas estas obras que mejoran los accesos de Vigo no solo serían buenas para los que nos visitan, sino también para sentirnos orgullosos nosotros mismos de nuestra ciudad", reflexiona Javier Garrido, presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliario: "Animamos a que este estado de colaboración entre administraciones continúe y sea ambicioso en objetivos, que haga que los accesos a Vigo sean lo más representativos posibles".

"La vía a seguir"

Desde el colectivo empresarial se pone el acento en la voluntad de colaboración que transmitieron el jueves las diferentes instituciones. El presidente del Círculo de Empresarios de Galicia, Juan Ramón Güell, aplaude que los organismos públicos "vayan al unísono": "Es lo que realmente necesitamos, un aumento del nivel de entendimiento. Nos esperan años complicados y necesitamos que todo el mundo reme en la misma dirección". El derribo del vestigio del scalextri sobre Alfonso XIII y la construcción de un subterráneo que enlace con la AP-9 le parece "un primer paso estupendo". "Esto estaba pendiente desde hace casi tres décadas y es un buen momento para hacerlo".

De opinión similar, su homólogo de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP), Jorge Cebreiros, insiste en que el túnel de Lepanto no solo puede facilitar el acceso a la autopista y servir a los usuarios de la futura estación intermodal; deberá también servir para "humanizar la zona", que es "un paso de comunicación imprescindible". En la actualidad -recuerda- el acceso por autopista es "lamentable". Su análisis del pacto alcanzado el jueves es también optimista y esperanzador:"Este es el camino: que diferentes administraciones se pongan de acuerdo por el bien de la ciudad. Esperamos que se siga por esta vía, tanto por Vigo y como por el área".

En la importancia de las infraestructuras pone el énfasis el presidente de la Federación de Empresarios de la Hostelería de Pontevedra (Feprohos), César Sánchez-Ballesteros, quien recuerda que el acceso actual de la AP-9 en Lepanto funciona a menudo como "tapón" y no facilita las comunicaciones en el interior de Vigo, sobre todo para los conductores de otras ciudades. El representantes de los taxistas, Manuel Chorén, recuerda que liberar la AP-9 permitirá "descongestionar" Sanjurjo Badía, ahora saturado de tráfico; además de adecentar uno de los accesos claves de Vigo.

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