El pleno del Consorcio de Zona Franca aprobó ayer los presupuestos para este año siete meses después del primer intento, en julio de 2016. El tercer documento presentado por el organismo sí recibió el visto bueno del presidente del pleno y alcalde de Vigo, que accedió a convocar la sesión plenaria dos días antes de que expirase el plazo dado por el Ministerio de Hacienda para incorporar estas cuentas a los Presupuestos Generales del Estado. De hecho, Abel Caballero culpó directamente a la delegada del Estado, Teresa Pedrosa, del retraso porque "no los quiso presentar en tiempo y forma y al final la obligó el ministro". La delegada, por su parte, lamentó que el regidor vigués hubiese querido retrasar tanto la aprobación.

El documento, que contempla una inversión de 41,3 millones de euros, fue aprobado por ocho votos a favor -faltaron dos miembros-, siete abstenciones y ningún voto en contra que permitieron desbloquear la situación aunque solo de forma aparente ya que, como precisó la propia Pedrosa, no existen "garantías" de que el grueso de las inversiones se puedan ejecutar al mantenerse el veto de Caballero a los convenios de la ETEA y al proyecto de la Central de Transportes.

Así, todas las actuaciones que incluyan una variación patrimonial, esto es, una compra o una venta, deben ser aprobados por el pleno y éste debe ser convocado por el alcalde vigués, que al ser cuestionado al respecto por Pedrosa en el turno de ruegos y preguntas le dijo que "lo hará si le interesa".

"Yo trataré por todos los medios de ejecutar los acuerdos plenarios y del comité ejecutivo", dijo Pedrosa, que acusó al regidor vigués de "no querer que el Estado,a través de Zona Franca, invierta en la ciudad". En todo caso, se comprometió a ejecutar todos aquellos proyectos que dependan del comité ejecutivo, que ella preside.

Entre otras cuestiones, la delegada ironizó al respecto de que el alcalde exigiese una mayor "concreción" en el proyecto de la Central de Transportes, para el que se han consignado 5 millones de euros, mientras que no ha aportado "ni un solo papel" sobre la Panificadora pero avala que se destinen 4 millones de euros para este proyecto "del que no sabemos nada". "Es incomprensible", dijo la delegada, que afirmó que ha pedido en diez ocasiones reunirse con Caballero sin recibir ninguna respuesta.

"Lo que puedo garantizar es que los acuerdos benefician a Vigo prácticamente en su totalidad porque la única inversión fuera de Vigo es la del Puerto Seco. Todos se van a ejecutar si dependen de esta delegada y los que dependan del pleno si el alcalde quiere convocarlo se ejecutarán y si no quiere no se ejecutarán", resumió.

En rueda de prensa, Caballero justificó la abstención de su grupo a las cuentas de este año por considerar "muy positiva" la partida para la Panificadora, que permitirá tramitar las expropiaciones y adecuar el emblemático edificio industrial, pero no estar de acuerdo con la falta de "concreción" con la partida de 5 millones para la Central de Transportes ni tampoco los 5,5 millones para la ETEA.

"Una parte de los presupuestos es muy buena y lo compartimos pero planteamos una abstención para mostrar nuestra disconformidad con esos 5,5 millones para la Xunta", dijo Caballero, que aseguró que "el resto es un buen presupuesto y en algunos aspectos muy mejorado con respecto al que habían presentado antes".