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Los juzgados registran un récord de 5.600 casos penales menos por las reformas legales

La ley que sacó de los tribunales los atestados de delitos sin autor conocido y la despenalización de ciertas infracciones leves causan una caída de litigios de un 40%, superior a la media gallega

Una funcionaria, en un juzgado de Instrucción. // M. G. Brea

Un desplome de causas sin precedentes que tiene su explicación en dos reformas impulsadas por el Ministerio de Justicia. Los juzgados vigueses han registrado durante el primer trimestre del año la friolera de 5.600 asuntos penales menos que en el mismo período del ejercicio anterior debido a la entrada en vigor de dos modificaciones legales que han eliminado de forma radical del ámbito judicial litigios que antes sí llegaban ante los magistrados. Una de estas nuevas leyes es la que entró en vigor en diciembre de 2015, en la que se estableció que los atestados policiales referentes a delitos sin autor conocido ya no se remiten a los tribunales. Y la otra fue la que derivó del nuevo Código Penal con la despenalización de varias infracciones leves, entre ellas las que eran consecuencia de accidentes de tráfico. Todo ello ha provocado que el volumen de asuntos penales haya caído un 40%, por encima de la media gallega, que se sitúa en un 36,2, aunque ligeramente por debajo de la española, que es de un 42,7: entre enero y marzo se contabilizaron 8.419 casos, frente a los más de 14.000 del mismo trimestre de 2015. Y dado el peso que los litigios de esta naturaleza tienen en las estadísticas globales de los juzgados, el desplome general también es importante, de casi un 31%: de superarse las 20.000 causas se ha pasado a las 14.312 actuales, algo a lo que también ha contribuido el descenso, ya mucho más tímido, de casos civiles, matrimoniales y laborales. Las demandas contra la Administración y los asuntos de violencia de género son los únicos que crecen.

El Consejo General del Poder Judicial dio ayer a conocer las estadísticas del primer trimestre del año. En contraposición con el incremento de litigiosidad que durante años experimentaron los juzgados vigueses, el 2016 supone un vuelco a este escenario con un acusado descenso de pleitos derivado de las dos reformas legales impulsadas en 2015 y que tocaron de lleno a las salas de Instrucción. Así, en el ámbito penal los 7.866 casos que entraron en estos tribunales instructores entre enero y marzo suponen un 41, 4% menos que los del año anterior. Y los 221 que llegaron a las tres salas de lo Penal para enjuiciamiento suponen un 32% menos. Sólo aumenta la actividad -en un 11% al alcanzar los 332 litigios- en el tribunal especializado en Violencia sobre la Mujer.

Más jurisdicciones

En el ámbito civil la actividad también desciende, pero de forma mucho más tímida y por causas ajenas a las reformas que provocaron el desplome en Instrucción. Entre enero y marzo hubo 4.246 asuntos, un 12,1% menos que en el primer trimestre de 2015. También hay menor cantidad de pleitos laborales: el descenso fue de un 11,1%, al contabilizarse entre este enero y marzo 1.293 causas. Y frente a este descenso prácticamente generalizado, donde creció la litigiosidad este año fue en los juzgados de lo Contencioso-Administrativo: lo hizo más de un 8% al registrarse 354 demandas.

En cifras globales, igual que bajaron los asuntos registrados, también lo hicieron los resueltos, ya que los 14.837 contabilizados son casi un 32% menos que los que constan en el mismo período de 2015. Y un dato positivo es que se redujo asimismo la bolsa de casos pendientes de resolver: los 11.478 litigios a la espera de respuesta con los que se acabó este marzo son casi un 10% menos que los del año anterior.

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