Aunque a partir de ahora el trabajo de revisión de causas judiciales en instrucción deberá ser continuo, el verdadero aluvión se vivió de cara a este pasado lunes 6 de junio, ya que los fiscales tuvieron que revisar 1.166 casos en investigación en los ocho juzgados de Instrucción y en el de Violencia sobre la Mujer de Vigo, pidiendo la complejidad de 368 litigios y plazo máximo en varias decenas más. Con este balance, unos 700 asuntos deberán cerrarse, bien por su archivo o para derivarlos a juicio. Y estos últimos provocarán, tras el verano una vez se complete su tramitación, un aumento excepcional de asuntos para vista oral en los tres juzgad os de lo Penal y en la sección viguesa especializada en esta materia de la Audiencia Provincial de Pontevedra.

Una problemática en la que fuentes judiciales insistían ayer es en que, dado el limitado plazo de seis meses establecido en la reforma legal para instrucción ordinaria, los casos podrían llegar a juicio con una "instrucción pobre". "Podría haber un leve aumento de absoluciones por falta de prueba", dicen. También es probable que en los juzgados penales reciban peticiones de pruebas, como citación de testigos, que no dio tiempo a completar en la investigación del caso. "Hasta ahora las instrucciones venían muy completas, pero nos podemos encontrar con que sea frecuente tener que citar para juicio a testigos que no habían comparecido hasta ese momento", afirma un letrado de la Administración de Justicia (secretario judicial).

El riesgo de que los casos lleguen a juicio sin que de tiempo a practicar todas las diligencias ya fue puesto de manifiesto en las últimas semanas en Vigo por jueces, fiscales y abogados.