Tras año y medio desde su apertura, el proceso de contratación del socio tecnológico está en su fase final. El Sergas espera adjudicarlo en marzo y formalizarlo en abril. Su gerente, Antonio Fernández-Campa, reconoce que los plazos para la dotación del nuevo hospital -que se prevé abrir en julio- están "un poco justos", pero dentro de lo previsto. Añade que, además, tienen una "ventaja adicional": al estar el hospital sin pacientes es más sencillo instalarlo.

La licitación se publicó en septiembre de 2013. Se invitó a participar a las empresas que lo solicitaron en diciembre y enero. Se dialogó con ellas entre marzo y junio. El siguiente semestre, el Sergas lo dedicó a analizar qué demanda tiene, de qué dispone para satisfacerla, qué se puede reutilizar, qué hay que actualizar o qué es mejor sustituir. Con ello y con el conocimiento adquirido en las conversaciones con las empresas, elaboró una "solución final" con las necesidades mínimas que se deben cubrir. En febrero valorará las ofertas de las aspirantes. "La mayor dificultad fue el tiempo, mayor del que esperábamos, pero si se tiene en cuenta de que es una renovación a 8 años, no es tan largo.