Diversos colectivos sociales, como el Grupo Imán y los Afectados por abusos bancarios, participaron ayer en una concentración a las puertas del Concello, para la práctica inmediata de las ayudas de emergencia social (RISGA). Aproximadamente 50 personas se reunieron en la concentración convocada por la Red de Solidaridad Popular de Vigo.

"Hay personas que, después de 10 meses, todavía no han recibido la ayuda, y eso que el plazo de ejecución es de tres", explica Elisa Pérez, portavoz del grupo motor de la Red en Vigo. Además, a partir de octubre, la cantidad apercibida se reducirá casi a la mitad. "Hay familias que se mueren de hambre ya que no tienen ni para el alquiler", añade Pérez.