La operadora del mercante Baltic Breeze, Wallenius, y la empresa de flete del buque, UECC, rechazaron ayer que el carguero tuviese algún fallo en su sistema de iluminación que pudiera haber provocado una confusión en el patrón del pesquero Mar de Marín, y que hubiese desencadenado la colisión entre ambos barcos. El siniestro se saldó con cuatro fallecidos y un marinero desaparecido.

En un comunicado, las empresas mantienen que durante la inspección realizada tras el choque por parte de miembros de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos, "todo a bordo del buque funcionaba al cien por cien".

La reacción de los responsables del Baltic Breeze se produce un día después de que los supervivientes del pesqueron declarasen sobre los hechos ante la titular del juzgado de instrucción número 7 de Vigo.

Uno de los marineros, a la salida del juzgado vigués, habló de la presencia de un potente foco en un costado del carguero, lo que pudo confundir al patrón, según su versión, y hacer que tomase un rumbo equivocado, cruzándose en la línea de navegación del carguero.

"Lo que se está comentando sobre esta materia es pura especulación. Durante la declaración de la tripulación del Mar de Marín ante la jueza, este tema no fue mencionado en ningún momento por nadie", dicen las empresas que no niega que las declaraciones fuesen posteriores.