La Operación Coladores, abierta a raíz de la Operación Tron contra la mayor red de distribución de ropa falsificada en A Pedra, desencadenó ayer la imputación de la inspectora jefe de uno de los grupos de la unidad contra la droga y el crimen organizado (Udyco) de la Policía Nacional de Vigo, M.J.F.H., y la detención de su marido, el subinspector de la comisaría M.J.M.D. por presuntos chivatazos al considerado cabecilla de la trama, José Manuel T.R. Éste fue detenido con su mujer, dos empleados y un cabo de la guardia civil -que supuestamente también les daba cobertura- el pasado mes de diciembre.

Efectivos de paisano del equipo contra la delincuencia y antidroga de la Guardia Civil (EDOA), arrestaban a primera hora de la mañana de ayer con gran discreción al subinspector de la Policía Nacional en un aparcamiento cuando, acompañado de su mujer, acababan de dejar con el coche oficial a uno de sus hijos en el colegio. No lo esposaron y en ese momento comunicaron a la inspectora que estaba imputada y le pidieron que de forma voluntaria acudiera por la mañana a la comandancia de la calle Barcelona.

Ambos se negaron a declarar durante su estancia en el cuartel de la Guardia Civil, como suele ser habitual entre los efectivos interrogados por funcionarios ajenos al cuerpo de seguridad al que pertenecen, y a últimas horas de la mañana comparecían en el Juzgado de Instrucción 1, que coordina la operación. Tras más de tres horas de interrogatorios el subinspector quedaba en libertad con cargos, mientras que la inspectora -que se presentó voluntariamente para declarar pero cuyo interrogatorio se pospuso- tendrá que comparecer en los próximos días. El matrimonio abandonó las dependencias judiciales pasadas las 17.30 horas en un coche policial camuflado que conducía otro compañero.

Inicialmente la Guardia Civil les imputa un presunto delito de omisión del deber de perseguir delitos y otro de supuesta revelación de secretos en relación con la trama de ropa falsificada, pero además añaden delitos de presunta falsedad y estafa a una compañía de seguros. En relación a estos últimos cargos también fueron imputadas ayer otras dos personas, vinculadas a una empresa náutica de la ciudad.

La Operación Tron, desarrollada el pasado mes de diciembre, se saldó con cinco detenidos (todos en libertad con cargos) y con la incautación del primer gran almacén de ropa falsificada, más de 50.000 prendas de grandes firmas, en una nave de la Avenida de Madrid, cuyo valor podría superar los 2,25 millones de euros. También se intervinieron 8.750 cajetillas de tabaco de contrabando de distintas marcas cuyo valor ascendía a unos 35.000 euros, según informó en su día el Instituto Armado.

Las escuchas telefónicas al presunto cabecilla de la red que distribuía ropa falsificada desde A Pedra, desvelaron su relación personal con la pareja de agentes de la Policía Nacional. El subinspector M.J.M.D era quien daba supuestamente cobertura a la red con datos que conocería a través de su mujer, a tenor de las grabaciones, y se sospecha que al menos otras dos operaciones anteriores de la Guardia Civil en A Pedra se habrían visto frustradas por los chivatazos.

La red atribuida a José Manuel T.R. se abastecía de la mercancía falsificada en Portugal, país en el que se siguen diligencias paralelas, y la trasladaban en furgonetas por Tui hasta Vigo, desde donde distribuían por toda España la mercancía.