La crisis azota con fuerza al sector de la construcción, pero algunas urbanizaciones, pese a las dificultades y el lento ritmo de ventas de pisos, han conseguido salir adelante en los últimos años. Muy cerca del parque de Castrelos, a ambos lados del tramo de vial que va desde la rotonda adornada con la escultura del dodecaedro hasta la siguiente glorieta de la carretera de subida a la Universidad, varias promotoras han desarrollado gran parte del denominado ámbito de "Chantada". Todos los espacios públicos están a punto para pasar esta semana a manos del Concello. Actualmente hay cinco bloques concluidos que suman 230 viviendas y un sexto inmueble con la estructura edificada, aunque parado en estos momentos. Quedan por transformar dos manzanas, una de ellas de propiedad municipal y también clasificada con uso residencial. La urbanización cuenta, así, con 275 pisos entre los disponibles y los que han empezado a levantarse, y podrá albergar 125 más si se completa la operación inmobiliaria, según datos de la Concejalía de Urbanismo.

El consejo de la Gerencia aprobará definitivamente este viernes la recepción de los espacios públicos de la urbanización, conformados por más de 14.000 metros cuadrados de viales, otros 3.522 m2 repartidos en diferentes zonas verdes, y el mobiliario y arbolado. La inversión en estas obras superó los dos millones de euros.

La entrega de las zonas públicas es un requisito indispensable para obtener la licencia de primera ocupación de los pisos, con lo que a partir de la semana que viene ya podrán solicitarse estos permisos. Según las promotoras consultadas hay en torno a 110 viviendas vendidas, una cifra baja si se compara con la rapidez con la que se adquirían pisos hasta hace cinco años, aún más en una zona que está próxima al centro urbano y bien conectada. Aunque no se concedieron las licencias de primera ocupación, la urbanización dispone de todos los servicios básicos y ya hay más de medio centenar de pisos habitados.

La llamada Unidad de Actuación 03 Chantada abarca 30.000 metros cuadrados divididos en ocho manzanas y ya estaba planificada en el PXOM de 1993. La aprobación del Plan Especial del ámbito, sin embargo, no se produjo hasta 2004, lo que entonces dio vía libre a la construcción de los espacios públicos y de los bloques de cuatro, cinco y seis plantas. La promotora con mayor superficie de suelo edificable, Mario Puentes, ha terminado las obras de sus cuatro inmuebles, que suman 180 pisos. También lo ha hecho Inversiones Dadu, cuyo bloque de 52 viviendas –47 de ellas ya vendidas– se sitúa en la parte más alta y soleada del ámbito. Justo al lado de este edificio queda por desarrollar una pequeña pieza de suelo de1.000 m2 propiedad de dos particulares en la que se podrían levantar diez viviendas. La construcción de otro bloque, de la empresa Promociones Manuel Vázquez, permanece actualmente parada, mientras que otra firma, Extraco, cuenta con una parcela donde todavía no ha iniciado las obras.

El ámbito está vertebrado por el tramo inicial del vial de la Universidad (calle Clara Campoamor). A un lado está el colegio Canicouva y de hecho la actuación incluye la cesión de una parcela de 2.400 m2 al lado del centro para un equipamiento educativo. Al Concello le corresponde una manzana de 1.400 m2 en la que podría construir un bloque de cuatro alturas con unas 45 viviendas. Esta parcela ha entrado a formar parte del Patrimonio Municipal de Suelo y la Gerencia de Urbanismo decidirá si la desarrolla directamente o la subasta.

Los compradores de los pisos vendidos son mayoritariamente particulares interesados en residir cerca del centro –la urbanización está a 1,3 kilómetros de la Plaza de América en línea recta a través de la avenida de Castrelos–, vecinos de Valladares que quieren contar con una segunda vivienda en la zona, y empleados de empresas próximas. Así, residen ya allí trabajadores de PSA-Citroën y de varias de las firmas instaladas en el Parque Tecnolóxico e Loxístico.

La urbanización cuenta con una zona verde en la parte alta, lindante con el parque de Castrelos, y arbolado tanto en la calle principal como en las cinco transversales. Además hay otros cinco espacios ajardinados de menores dimensiones en diferentes ámbitos de la parcela.

Sanción elevada

Por otra parte, la Gerencia impuso una multa de 24.853 euros los propietarios de otra edificación situada en la avenida de Castrelos por una infracción grave al añadir de forma ilegal una planta y un ático.