La Xunta ha adjudicado la redacción del proyecto básico y de ejecución de rehabilitación del castillo de Pambre, la última fortaleza feudal que queda en pie en Galicia y que actualmente tienen en propiedad los Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres de Teis tras dejársela en herencia el fallecido Conde de Borraxeiros en 2009. Pese a que el Gobierno gallego todavía no ha efectuado la compra del inmueble –anunciada por el presidente Feijóo hace un año–, ha iniciado el proceso administrativo para reformarlo a través de la Secretaría Xeral para O Turismo, que ha otorgado a una empresa el trabajo de elaborar el proyecto por 56.640 euros (IVA incluido). Sin embargo, los dueños del castillo lo desconocen. "Nosotros no sabemos nada", asegura el portavoz de los Misioneros, el hermano Donaire, en alusión tanto a la adquisición como a la rehabilitación del castillo, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) y construido a finales del siglo XIV en el municipio de Palas de Rei (Lugo).

La adjudicataria definitiva, Mario Crecente y Asociados Consultores, fue la única de las cinco firmas licitadoras que acreditó el cumplimiento de requisitos, por lo que se hizo con el contrato de redacción del proyecto.

En cuanto a la adquisición del castillo, fuentes oficiales de la Consellería de Cultura precisaron ayer que "se sigue adelante con la compra", es decir, que está en trámites, pero todavía no se ha formalizado. ¿El importe? "Una cifra semejante a la anunciada", apuntan.

La cuantía que anunció Feijóo rondaba los 5 millones de euros. El acuerdo para efectuar la compraventa de la fortaleza por este valor se produjo en enero de 2011, después de un año de conversaciones entre las partes que encallaron en noviembre de 2010 cuando los Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres rechazaron la oferta de 1,1 millones de euros que les trasladó el Ejecutivo autonómico. La congregación siempre manifestó que su intención era que el castillo fuese a parar a la Administración y todo parece indicar que ese momento no tardará en llegar: la Xunta dice que "está a punto".