“Comedor: solución xa”. Con este lema más de 80 padres de alumnos del colegio público Illas Cíes (antiguo Eijo Garay) salieron ayer a la calle para exigir a las administraciones autonómica y local que se pongan de acuerdo en la ubicación de un nuevo comedor “digno” para iniciar “ya” su construcción. Actualmente cien niños de Infantil y Primaria (se contabilizan 110 algunos días de la semana) almuerzan en dos turnos en la antigua casa del conserje, con una superficie de 35 metros cuadrados dividida en tres pequeños habitáculos, lo que impide a los escolares verse los unos a los otros y al mismo tiempo dificulta la vigilancia por parte de los cuidadores.

Entre las deficiencias detectadas figura un cuarto de baño de reducidas dimensiones para compartir entre un centenar de niños y niñas (no pueden lavarse los dientes porque no hay espacio para todos los cepillos), la ausencia de un sistema de ventilación y de colgadores para dejar sus abrigos (tienen que llevarlos al gimnasio), entre otras. Los alumnos mayores de 7 años deben esperar una hora desde que finalizan las clases para poder comer, puesto que el primer turno se reserva para los más pequeños, es decir, para los escolares de Infantil y los de primero y segundo curso de Primaria.

En definitiva, los niños comen en “pésimas condiciones” que los padres no están dispuestos a tolerar por más tiempo, sobre todo teniendo en cuenta que la ampliación del comedor de este centro de Coia se incluye en los compromisos adquiridos por la Consellería de Educación hace más de un año.

“Hemos enviado un informe técnico al Concello en el que se indica que el bajo es el lugar apropiado para el nuevo comedor”, afirman fuentes del departamento autonómico. Sin embargo, tanto desde el gobierno local como desde la propia asociación de padres del centro apuntan a la explanada de más de 200 metros cuadrados situada en la parte superior de esa planta como la ubicación idónea para construir la instalación. “Abajo podría hacerse un salón de usos múltiples”, dicen desde el Concello. La vicepresidenta del Anpa, Belén Fernández, y otros padres preguntados por este periódico consideran “peligroso” emplazar el comedor en el bajo porque la puerta de acceso se encuentra justo al lado del portalón del colegio (en la avenida de Castelao).

La protesta, con silbatos, cacerolas y las ya conocidas “vuvuzelas”, contó con la presencia de representantes de la Federación Olívica de Nais e Pais de Alumnos (Foanpas). Su secretario, Nel Pena, instó a los departamentos local y autonómico de Educación a que alcancen un acuerdo porque “es su labor y obligación”. “Si no lo hacen, demuestran su ineptitud”, avisa Pena.

Cuatro colegios a la espera

En cuanto a los seis colegios vigueses con los que la Xunta se comprometió a ampliar sus comedores, todavía son cuatro en los que no se han iniciado las obras. Son el Illas Cíes, Balaídos, Pintor Laxeiro y O Pombal. En estos dos últimos casos, la Consellería de Educación asegura que sus proyectos están “en fase de redacción”. Con respecto al Balaídos, el documento está finalizado y a la espera de que el Concello conceda la licencia. Los trabajos en el CEIP Frián-Teis se encuentran en ejecución y en el Otero Pedraio ya han concluido.