El Tribunal Superior de Xuztiza de Galicia acaba de ratificar la multa impuesta a una autoescuela de la provincia por mantener precios pactados para la obtención del permiso de conducir de clase B, es decir el que permite llevar turismos.
La sentencia del Alto Tribunal se produce al rechazar el recurso contencioso administrativo que interpuso la empresa sancionada, "Mondariz Xestión S.L." . Dicha entidad había sido sancionada, por el Tribunal Galego de Defensa de Competencia, a pagar una cantidad de 10.000 euros. La resolución fue dictada el 27 de diciembre de 2007 y la sociedad afectada recurrió al Tribunal Superior, que ahora ratifica aquella multa.
La empresa sancionada alegó, en su recurso, que no había "prueba directa", ya que consideraba que en la resolución de Competencia "carecían de base probatoria los hechos considerados, tanto en lo relativo a la coincidencia de las tarifas empleadas por las autoescuelas objeto de investigación como en lo referente a la recomendación colectiva acerca de la aplicación de esas tarifas por parte de la Asociación Provincial de Autoescuelas". En sus alegaciones, contenidas en el recurso, el abogado de la empresa hacía mención a la necesidad de pruebas directas para imponer la sanción. Al mismo tiempo, consideraba excesiva la cuantía de la multa. También este último extremo lo desmonta la sentencia del Tribunal Superior al ratificar la cantidad de 10.000 euros como adecuada, recordando, además, que la legislación autoriza a elevar la cuantía hasta 25.000 euros en función del volumen de negocio.
El Alto Tribunal señala que la "prueba directa" que pedía la recurrente es de difícil consecución, ya que considera "evidente" que no es fácil que "se muestre externamente y sin disimulo sus acciones quien realiza actividades que la legalidad no ampara". Según los magistrados, la exigencia de la "prueba directa" en este caso "conduciría a la impunidad en la práctica de este tipo de acciones".
Tarifas coincidentes
El Tribunal da por buena la resolución de Competencia, que considera inexplicable que coincidan los precios de las clases y matrículas en autoescuelas del sur de la provincia, aunque en el caso sancionado se trate del único centro que existe en la localidad de Mondariz, otro de los argumentos ofrecidos por la empresa sancionada.
Los magistrados dan también por buena la investigación e Competencia sobre la coincidencia de precios de las autoescuelas en Mondariz –donde sólo opera la sancionada–, en Tomiño –donde hay dos–, en Tui –tres– y en Vigo, donde operan 41 autoescuelas.
En la resolución del Tribunal Superior pesaron las declaraciones de dos testigos, propietario y encargado de autoescuelas de Vigo respectivamente. El primero de ellos puso de manifiesto la práctica concertada por la asociación provincial al señalar que "con cierta periodicidad recibía la visita de una comisión formada por nombre de la asociación" para que aplicase los mismos precios, y le indicaban que "era mejor que todos cobrasen lo mismo, pues si cada uno ponía una tarifa iba a pasar lo mismo que en A Coruña, donde cada uno cobra lo que quiere y los precios caen". El segundo testigo afirmó que la confederación de autoescuela entrega a cada una los precios mínimos a aplicar por cada permiso de conducir.
