"Ni pretendo ni me gustan las unanimidades. Tal cosa no tiene sentido en un colectivo diverso, maduro y complejo como éste", indicó el presidente del Colegio Oficial de Arquitectos de Vigo, Salvador Fraga, sólo un día después de estrenar la nueva sede del centro en la ciudad y ante las críticas de un sector de los colegiados, que llegaron a plantearse una moción de censura para derrocarlo del poder.

Al mismo tiempo, dejó vía libre a esta posibilidad, siempre que se haga dentro de los cauces legales y marcados por los Estatutos: "Las reglas de juego del colegio son los Estatutos. Y sí que prevén una moción de censura. Lo único que yo digo es que se respeten las reglas del juego", dijo tras ser preguntado por esta posibilidad.

"Mi ánimo no es que todos estemos de acuerdo", reconoció el presidente. Con motivo del estreno de la sede, un sector crítico con su trabajo amenazó con presentar una moción en los próximos meses "si no hay una renovación a fondo", como advirtió el protavoz del grupo discordante, Francisco Castro.

Por eso, Salvador Fraga aprovechó para pedir a los adversarios que "jueguen limpio". "El presidente tiene la obligación de hacer respetar los Estatutos. Las minorías tienen derechos, claro: pero la mayoría también", aseguró.

Asimismo, aprovechó para indicar que los Estatutos que rigen el órgano colegiado están aprobados en Asamblea general por todos los arquitectos de Galicia en junio de 1998, y refrendados en enero de 2009 por el Consejo Superior. "Son recientísimos, están refrendados hace sólo diez años", explicó en relación a la petición de renovar las normas que rigen el funcionamiento.

La última cuestión que aclara se corresponde con la peliaguda crítica vertida por los opositores, que acusaron a Fraga y el despacho en el que trabaja de beneficiarse de obras públicas y haber descuidado la obligación de sacar a concurso público las contrataciones del Estado. "El aparcamiento que hoy [por ayer] se inauguró en Vigo es privado y pasa por un concurso público de adjudicación. Además de que cuando comenzó su construcción yo ni siquiera era presidente".

El concejal de Urbanismo, José Mariño explicó el día anterior que el despacho en el que trabaja Fraga tiene sólo una obra municipal en la actualidad, a lo que el arquitecto responde: "Es el plan especial de acondicionamiento de la Avenida de Europa a Samil; es un planeamiento que también salió a concurso".