Aparcar mal dentro del vial que circunda la factoría de Citroën, en el polígono de Balaídos, conlleva a partir de ahora multa, aunque sea un recinto cerrado. El Concello y la Zona Franca han llegado a un acuerdo que permite a los vigilantes denunciar a los infractores de forma voluntaria como hacen ya los controladores de la XER -las plazas de aparcamiento de pago en la ciudad-.
El personal de control del parque industrial cubrirá un impreso y aportará una fotografía para documentar la infracción. Incluso se enviará a la grúa en los casos en los que se entorpezca de forma grave el tránsito en las inmediaciones de la fábrica.
El concejal de Tráfico, Xulio Calviño, y el secretario general del Consorcio, Santiago López Guerra,comparecieron ayer para anunciar el acuerdo,llamado a poner fin a un viejo problema que afecta a la movilidad dentro de la factoría.“Algunos vehículos causan molestias para la circulación de grandes camiones al estar estacionados en doble fila, pasos de peatones u ocupando el amplio espacio destinado al transporte público”, explicó el edil.
Zona Franca, por su parte, se ocupará, entre otras condiciones incluidas en el convenio, de mantener una correcta señalización.
“Nos preocupa el normal funcionamiento de ese vial por la importancia de la factoría. Obstaculizar el paso de un camión obliga a su conductor a realizar una maniobra.Además, en cada turno de Citroën trabajan 3.000 personas, de las que muchas llegan en sus coches, con lo que puede haber colapso en horas punta”, detalló López Guerra. El alcalde y la delegada del Consorcio han firmado el convenio, con lo que las multas voluntarias pueden ya aplicarse en el polígono.
Práctica habitual
Los vigilantes del parque industrial ya ponían denuncias, como reveló FARO en enero,pero el Concello explicó entonces que no las tramitaba al carecer de base legal. Como firma se utilizaban las iniciales del organismo estatal, y el Zona Franca defendía la legitimidad en virtud de un antiguo acuerdo.
Ahora la situación se regulariza tras las negociaciones mantenidas entre ambas partes para formalizar un acuerdo y establecer las condiciones jurídicas, a fin de que las denuncias estén blindadas.“Los vigilantes denunciarán de forma voluntaria con su nombre y DNI, y los servicios de Tráfico se encargarán de tramitar las multas”, expuso Calviño.
