Bajo el sol del mediodía muchos vigueses buscaban una sombra bajo la arboleda del Monte de A Guía para disfrutar con su familia de una deliciosa ración de los 1.500 kilos de sardinas, acompañada de pan de maíz, que se repartieron entre todos los asistentes a la XX "Festa da Sardiña".

"Nos pasamos casi un año preparando esta fiesta", confiesa José Gonda, presidente de la comisión de fiestas de A Guía, que asegura que "cada vez viene más gente, se nota que es una fiesta que gusta".

La música y los bailes no decayeron durante la jornada, ya que fueron varios grupos los encargados de amenizar la romería. Durante el día los asistentes disfrutaron de las actuaciones de una banda de música, gaiteiros y pandereteiros. Ya por la noche llegó el turno de la verbena, que animó la fiesta hasta bien entrada la madrugada.

La mayoría de los comensales coincidían: "La verdad es que las sardinas están riquísimas". Otros, sin embargo, consideraban un poco excesivo el coste de las raciones: "Me encantaría ir a todas las fiestas gastronómicas, pero con estos precios no se puede", recriminaba Yago, un joven de A Guía que compartía mesa con varios amigos. A su juicio, "estas fiestas no son sólo para mayores; no hay edad, sólo hay que disfrutar".

También destacó la presencia de la peña Os Cheos, vecinos de A Guía, que confesaron que no se pierden ni un solo evento gastronómico. "Organizamos excursiones a muchas de estas fiestas", comentaba Mauricio Ansorregui, presidente de la peña.

Durante el pregón, se destacó la importancia de un producto tan típico, la sardina, para una ciudad portuaria como Vigo y se animó a todos los asistentes a disfrutar de la fiesta.

Como cada año, se hizo entrega de la Sardiña de Ouro. En este caso, el galardón fue para la Asociación Freixeiro de Axuda ao Necesitado (AFAN), por su labor en la ayuda a los más necesitados.