Las parroquias viguesas mantienen la tendencia de la pirámide de edad de todo el municipio. La franja de edad que más vecinos engloba es la comprendida entre los 31 y los 35 años. Vigo tiene una población relativamente joven, en comparación otros ayuntamientos de Galicia. De hecho es la primera ciudad de la Comunidad Autónoma en número de nacimientos.

La tendencia, que se asienta sobre todo en el casco urbano -por agrupar una mayor población- se mantiene en el análisis que se puede realizar sobre el padrón de las parroquias. De las 18 que componen el rural y la periferia de la ciudad, la más "joven" es la de Castrelos. Es al menos la que agrupa, en su población, un mayor número de niños de hasta cinco años, así como de menores hasta los diez años de edad.

Por el contrario, la parroquia en la que viven vecinos de mayor edad es la de Bembrive. Allí hay, según los datos del último censo, 18 personas que tienen más de 96 años. A continuación se encuentran la parroquia de Beade. Son las dos más "altas" por su posición geográfica del municipio.

En las parroquias viguesas residen alrededor de un centenar de personas que tienen más de 96 años. Sólo hay una, siempre según los datos del Instituto de Estadística, en la que ninguno de sus vecinos llega a esa edad: Zamáns.

Precisamente esta parroquia, la más alejada del centro de la ciudad, es la que que tiene un menor número de habitantes, 810. La segunda con menos habitantes es Saiáns, en el límite con el municipio de Nigrán.

En el lado opuesto, la parroquia más poblada es la de Lavadores, donde viven más de diecisiete mil personas. A considerable distancia se encuentra Cabral, entidad limítrofe con la anterior, pero con una población censada de menos de la mitad, en torno a siete mil vecinos.

La media de población de las parroquias viguesas se sitúa en torno a los 5.500 censados. Un caso extraordinario lo constituye San Andrés de Comesaña. Es la entidad parroquial que más ha crecido, porcentualmente, en la última década. Hasta tal extremo que casi ha doblado su población desde el año 1998.

Bajas y altas

Las fluctuaciones de población que hay ente distintos lugares del término municipal también se traduce en las parroquias. En la última década han sido siete las que han perdido habitantes, cada una por motivos diferentes. Beade, Cabral, Castrelos, Freixeiro, Matamá, Saiáns y Teis -aunque esta última se asimila en parte al casco urbano de la ciudad- han visto cómo el número de vecinos empadronados ha descendido en los últimos diez años.

El resto ha crecido progresivamente, sobre todo Lavadores por el importante aumento de la capacidad residencial que se ha producido en la zona. La masiva construcción de pisos a lo largo de la línea que fija la avenida de Ramón Nieto ha sido un elemento clave.