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Galicia perdió un 22% de extranjeros desde 2012 y solo aumentan con fuerza los chinos

La población foránea retrocede a niveles de 2007 y ya solo suponen el 3,2% del total

En el alarmante declive demográfico que padece Galicia, la salida de extranjeros no es una preocupación cualquiera entre las muchas que hay y sus consecuencias. Porque en ellos está parte de la receta para mitigar el adelgazamiento sin tregua del padrón y el galopante envejecimiento. Todos los expertos coinciden en que la inmigración ayudaría a revitalizar la comunidad. El Foro Económico de Galicia y el Círculo de Empresarios lanzaron en 2014 un profundo análisis que estimaba en 20.000 las mujeres foráneas que cada año necesitaba la región solo para mantener "estable" el número de nacimientos. Pero la evolución real de la población no permite por el momento arañar un motivo de esperanza. De los más de 13.800 residentes que se perdieron el pasado 2016, dos de cada diez eran foráneos. Cuatro años van ya de caídas en el colectivo, que desde 2012 acumula un descenso del 22%. Son, según las cifras que acaba de actualizar el Instituto Galego de Estatística (IGE), menos de 88.000. La menor cifra desde 2007 y su peso en el conjunto de la población gallega baja a apenas un 3,2%.

Con la reducción de los habitantes extranjeros Galicia se queda sin el equivalente a un concello de tamaño medio. Un descenso de 24.217 residentes entre 2012 -cuando se alcanzó el récord: casi 110.000 extranjeros, el 4% del total- y 2016. La misma población que suman, por ejemplo, O Grove y Cambados.

El principal país de origen de los foráneos asentados en Galicia es, evidentemente, Portugal. La cercanía es clave. Son cerca de 15.700, el 17,8% de los inmigrantes que están aquí. Hace cuatro años representaban más del 20%, lo que da ya una idea muy clara de que la nacionalidad lusa es una de las que arrastra una mayor merma en la comunidad. A continuación, como segunda procedencia, está Rumanía. Unos 8.800, prácticamente el 10% de los extranjeros que hay en Galicia. En tercer lugar aparece Brasil -por encima de los 7.000, el 85-; la cuarta posición es para el colectivo de marroquíes, que son 6.700 (7,7%); y en la quinta figura un país latinoamericano, Colombia, que reúne a 4.400 vecinos de la autonomía, el 5%.

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Entre las zonas de las que llegaron un mayor número de ciudadanos foráneos a Galicia solo hay cuatro que siguen la tendencia contraria. Al alza. ¿Cuáles? Destaca a mucha distancia del resto China, con un ascenso desde 2012 del 13,3%, hasta casi 3.000 residentes, el 3,4% de los extranjeros. La subida en el caso de Senegal (2.479) fue del 6,15; del 5,6% en los que vinieron de Rusia (641); y el 1,3% entre los ucranianos (540).

Las dos ciudades más pobladas son las que atraen más foráneos: 12.298 en Vigo y 10.448 en A Coruña. Sin embargo, los ayuntamientos en los que suponen más sobre su censo son Carballedo de Valdeorras (18,4%), Oímbra (16,7%) y Entrimo (11,3%). Los tres por la afluencia de portugueses. El cuarto es Burela (11,03%) por el desembarco desde países africanos; y Verín (10,1%), donde se mezcla el importante de peso de Portugal, Bulgaria, Rumanía, Marruecos y Brasil.

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